El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, es un hombre casero. Durante los preparativos de la campaña electoral, su equipo elabora los trayectos que harán los podemitas por todo el territorio español, y en concreto del mediterráneo, a partir de la premisa "Pablo duerme en casa". Es decir, que si un día el mitin es en Barcelona y por la tarde-noche en Valencia, Iglesias hará todo lo que pueda para volver al hogar, en el barrio humilde de Vallecas, donde vive con la pareja. No es una actitud extraña por parte del dirigente de Podemos. Es reconocido entre sus círculos de confianza que el madrileño tiene un carácter muy introvertido, y acostumbra a salir poco de casa, donde pasa buena parte del tiempo leyendo y estudiando, como ilustran sus tuits. Quién sabe si "Pablo duerme en casa" en unas pocas semanas hará referencia a la Moncloa, a la luz de las encuestas.