La Diputación de Barcelona ha ampliado hasta los 30 millones de euros las ayudas ofrecidas a los municipios para la mejora de los polígonos con la voluntad de favorecer el crecimiento empresarial, atraer nuevas oportunidades de negocio y generar ocupación de calidad.

Esta segunda convocatoria, valorada en 15 millones de euros, se engloba dentro de un proyecto que permitirá destinar 30 millones de euros a los polígonos

Marc Castells, presidente de la Diputación, considera que hace falta poner de relieve la colaboración público-privada ya que "el futuro del país pasa por creer en la industria", hecho que tiene que permitir sacar adelante "proyectos serios, rigurosos y posibles".

Actualmente la mayoría de los polígonos están desordenados y una parte significativa de su superficie está vacía, lo que deriva en una gestión ineficiente de los espacios y, en consecuencia, en una falta de incentivo para los empresarios. Por otra parte, muchos polígonos de la demarcación muestran signos evidentes de obsolescencia, ya que cerca del 58% de las industrias y del 48% de los polígonos son anteriores al año 1978, hecho que aconseja adoptar medidas de modernización y de mejora de la gestión integral.

El apoyo de la Diputación beneficiará a 5.901 empresas y 79.388 trabajadores

polígono industrial

Con esta inversión de la Diputación de Barcelona, se permitirá llevar a cabo actuaciones en 56 polígonos de actividad económica e impulsar 116 mejoras o nuevos servicios de infraestructuras. Se apostará por la igualdad de oportunidades y se incorporarán mejoras medioambientales o de eficiencia energética.

Dos líneas de apoyo

En esta segunda fase del Programa de modernización de polígonos, los proyectos que tengan ayuda económica de la Diputación se tendrán que enmarcar en una de las dos líneas de apoyo previstas, ambas con un presupuesto de 7,5 millones de euros y con un carácter plurianual (2019-2020).

La primera línea de apoyo tiene como objetivo contribuir a la financiación de intervenciones de alto impacto basadas en un planteamiento integral y estratégico. En la primera fase, aprobada hace un año, se dio apoyo a cinco proyectos que tenían un coste total aproximado de 10 millones de euros. Con respecto a la segunda línea de apoyo, en lo referente a los proyectos específicos, tiene como finalidad contribuir a la financiación de intervenciones puntuales. En este caso, durante la primera fase se impulsaron 17 proyectos, con un coste total de prácticamente 11 millones de euros.

Ámbito de actuación

Los proyectos incluidos en una de estos dos líneas de apoyo tendrán que tener como objetivo el despliegue o mejora de las redes de suministro y evacuación de aguas, de las redes de energía, de telecomunicaciones o de los sistemas de seguridad antiintrusión. Al mismo tiempo se podrán llevar a cabo acciones vinculadas a la mejora de la movilidad o a la promoción de los polígonos de actividad económica, así como en el ámbito de la simbiosis industrial o a la construcción, reforma o ampliación de centros de servicios de proximidad para las empresas de los polígonos de actividad económica.

El plazo para presentar solicitudes finaliza el 30 de noviembre de 2018

El plazo para presentar solicitudes finaliza el 30 de noviembre de este 2018, y de entre los criterios de valoración se pueden destacar los que hacen referencia al equilibrio territorial (población entre 16 y 65 años, centros de cotización del sector industrial, tasa de paro registral y renta disponible per cápita), la adecuación de la dimensión territorial, la madurez del proyecto, la existencia de cofinanciamiento, el grado de degradación del polígono, así como el nivel de ocupación de naves y parcelas. También se tendrán en cuenta criterios como el número de hectáreas de los polígonos objeto de la actuación, el mantenimiento y generación de ocupación, la aplicación de criterios medioambientales y de eficiencia energética y la incorporación de acciones destinadas a la mejora de la igualdad de oportunidades.