Lo natural siempre va bien conocerlo, es por ello que hemos querido conocer una hierba muy curiosa: la albahaca morada. Hoy en día, la variedad de hierbas que podemos encontrar es inmensa, con lo que es posible que muchos no la empleen en su cocina, pero seguramente todos hemos comido albahaca, seca o fresca, en alguna preparación.
La albahaca es una planta anual. Poseen hojas suaves y pequeñas; las flores son blancas y llega a medir hasta 90 cm. de altura. Es originaria de África, las islas del Pacífico y el Asia tropical. La albahaca fue introducida en Europa procedente de Oriente, en el siglo XVI y aún es empleada como hierba culinaria. Desgraciadamente, la hierba seca no se puede comparar con el sabor de las hojas recién cortadas del jardín.
Una planta originaria de África
Se cultivan diversos tipos de albahaca, entre ellas, ésta que tiene un color tan especial morado. Hay una variedad con hojas parecidas a las de la lechuga. El sabor de cada una de ellas depende de su contenido en aceite volátil. Una de estas formas cultivadas tiene un ligero sabor a menta piperita.
Es una planta relativamente fácil de cultivar. Tanto esta especie como otras se pueden tener en macetas. No le gustan las bajas temperaturas y durante el invierno de los climas fríos, sólo puede ser cultivada dentro de casa.
Albahaca morada
Tiene un color muy bonito y que la hacen peculiar. Es un color que llama la atención. La albahaca morada, por su llamativo color púrpura, es usada para decorar los platos y para formar parte de los vinagres de hierbas. Aunque poseen similares características, la albahaca morada, también conocida como regular, se distingue de la verde por su notable color y por sus hojas arrugadas. Es del género Ocimus de la especie basilicus, variedad Opal. Caracterizada por su esencia parecida al clavo.
Y la empleamos como la albahaca verde que casi todos conocemos. Sobre todo en sopas, ensaladas, guisos de pescado y de carne. Es ideal para acompañar al tomate, lo mismo en ensaladas como en salsas, pizzas o platos de pasta en general. Esta hierba morada se utiliza mucho para decorar platos. Las hojas secas y reducidas también se emplean como se usaba antiguamente el rapé. También se puede usar en preparaciones dulces.
No es fácil de conseguir en los mercados pero ahora ya la conocemos. Es posible que la veamos en algún mercado o podamos comprar semillas para sembrar en una maceta. Así que la próxima vez que la veas en tu tienda o en tu herbolario de confianza, que sepas que puede ser una excelente opción.