El Ayuntamiento de Barcelona y el Gremio de Restauradores se han marcado este jueves el objetivo de tener un acuerdo político sobre terrazas en verano y una nueva ordenanza a finales de año. El teniente de alcaldía de Empresa, Cultura e Innovación, Jaume Collboni, ha apostado por cerrar un acuerdo "de ciudad" que permita aprobar una normativa que perdure en el tiempo y que dé seguridad a los agentes económicos. Según Collboni, hay que modificar la normativa para hacerla "más flexible, adaptarla a los barrios y al espacio público".

Por su parte, el director general del Gremio, Roger Pallerols, ha reconocido que afrontan la temporada de verano "atemorizados" por la aplicación de la actual ordenanza que ha calificado "de ineficaz e inaplicable". Sin embargo, ha querido tirar un mensaje de tranquilidad y de confianza para el inicio de negociaciones para reformarla. "No estaríamos aquí si no diéramos confianza al teniente de alcaldía".

De todos modos, Pallerols ha avisado de que el gremio está estudiando recurrir trece ordenaciones singulares en Ciutat Vella, tal como han hecho en otros lugares, como la calle Blai.