El conflicto abierto entre el Ayuntamiento de Barcelona y los vecinos de la Colònia Castells, que piden que se paralicen las obras del parque por ser muy poco respetuoso con la memoria histórica de lo que durante años fue un pequeño barrio obrero en el corazón del distrito de les Corts de Barcelona, podría haberse encauzado este martes en el contexto de una reunión entre representantes del consistorio y miembros de la Plataforma Salvem el Camp de la Creu - Colònia Castells, pero el encuentro acabó con los representantes vecinales "descontentos e indignados" por una propuesta por parte del gobierno Colau que sólo preveía "pequeños ajustes para poder ejecutar el proyecto aprobado".

"Nos podríamos haber levantado de la reunión en el minuto cero", relata en conversación con elNacional.cat Josep Alió, miembro del colectivo vecinal y presente en un encuentro donde asistieron, por parte del consistorio, el concejal del distrito de les Corts, Joan Ramon Riera -que no se quedó hasta el final de la reunión-, una asesora del Área de Ecología, Urbanismo, Infraestructuras y Movilidad, al Arquitecto en Jefe del Ayuntamiento de Barcelona y la consejera técnica del distrito de les Corts. "Por respeto y por ser la primera vez que nos escuchaban -continúa Alió-, nos quedamos, pero la conclusión es la misma que en el primer minuto".

De hecho, después de que a finales de junio el ayuntamiento anunció el inicio de las obras del parque de la Colònia Castells con un proyecto rechazado por los vecinos, que piden que haya más respeto por la memoria histórica de este lugar, a lo largo de este verano han avanzado los trabajos y actualmente el futuro parque se ha convertido en poco más que un inmenso solar donde sólo han quedado en pie unos pocos árboles. Con todo, la reunión podría haber servido para acercar posiciones, sin embargo, siempre según el relato de los vecinos, se les presentó una propuesta que incluía sólo pequeñas modificaciones pero que mantenía, en esencia, el proyecto que ya está en ejecución, una propuesta que los vecinos no han querido tragarse.

"Nos reconocieron que el proyecto está mal planteado y que en los últimos años no ha habido interlocución política", apunta Alió, pero nos vinieron a decir que "como el proyecto está en ejecución, se tiene que acabar a toda costa". Por eso, los vecinos apuntan que por su parte no se acepta la propuesta presentada porque "la conclusión fue que si pudieran volver a empezar las cosas se harían como decimos nosotros, pero ahora sólo quieren cortar la cinta", es decir, estrenar el nuevo parque pocas semanas antes de las elecciones municipales de mayo del 2023.

"Colau borra la memoria de vecinos y vecinas"

"Volveremos a salir a la calle y volveremos a pedir cambios", apunta Alió, que añade que las peticiones del colectivo continúan vigentes en la necesidad de modificar el proyecto para asegurar el respeto a la memoria histórica y patrimonial de la zona. "Queremos que se respete la memoria", insiste Alió, para apuntar a la máxima responsable de todo ello, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau: "Continuaremos con la campaña de protestas y pediremos hablar con la alcaldesa, la interlocución tiene que ser con ella, porque ahora ya lo diremos bien claro: Colau borra la memoria de vecinos y vecinas". Así pues, mientras la construcción del nuevo parque no se detiene, la Plataforma Salvem el Camp de la Creu - Colònia Castells ya se prepara para defender su proyecto de parque.