El Tramvia Blau, histórico y emblemático transporte público de Barcelona, lleva más de siete años fuera de servicio, ya que en el 2018, el Ayuntamiento de Barcelona, con Ada Colau como alcaldesa, suspendió su funcionamiento con la intención de hacer una reforma integral que todavía no ha llegado. En este contexto, la Associació de Veïns d'avinguda Tibidabo ha reclamado este jueves al gobierno municipal que vuelva a poner en funcionamiento este tranvía, tras años de espera sin que haya habido ningún progreso. El presidente de esta entidad vecinal, Alexander Scheffler, ha explicado, en declaraciones recogidas por la agencia Efe, que los grupos municipales aprobaron una moción que instaba al Ayuntamiento a presentar antes de acabar el año 2024 un proyecto ejecutivo consensuado con la asociación de vecinos que "incluya la infraestructura tranviaria y la urbanización de la avenida Tibidabo".

Aunque el plazo ya hace meses que se agotó, el hecho es que este proyecto no ha sido presentado, y a la espera de esta propuesta, Scheffler ha asegurado que teme que el consistorio esté preparando una "pacificación de la avenida Tibidabo", cosa a la cual se opone "por completo": "No queremos una calle Balmes 2.0, no queremos que se mueva la estación del Tramvia Blau hacia el paseo Sant Gervasi solo para poner unos carriles bici donde no sube ningún ciclista", ha remarcado el presidente de la asociación vecinal, que ha abogado para restablecer el tranvía "en unas condiciones sensatas, sin destrozos urbanísticos de la avenida Tibidabo".

Asimismo, Scheffler ha destacado que el retorno se debería que llevar a cabo "como mucho el año 2026, porque se cumplen los 125 años del Tramvia Blau". "Los barceloneses ya hace siete años y medio que esperamos el retorno de este Tramvia Blau", ha apuntado Scheffler, que ha asegurado que llevaron a cabo una recogida de firmas, precisamente, para presionar para la reinstauración de este transporte urbano histórico y que, "en pocas horas", recogieron más de 3.000 firmas de "gente de todos los colores políticos, gente de fuera de la ciudad e incluso de turistas". Además, este dirigente vecinal ha defendido que el Tramvia Blau "es sostenible, ecológico y romántico, pero sobre todo es patrimonio de todos los barceloneses".

Hay que recordar que en enero del 2018, Transports Metropolitans de Barcelona anunció el paro indefinido del Tramvia Blau a partir del 1 de febrero, justificando la decisión con la falta de inversión que había recibido el tranvía en los últimos años y con la intención de reactivar el funcionamiento después de una renovación profunda de la estructura. De hecho, había la intención de remodelar todo el servicio, renovando catenaria y vías e implementando un nuevo esquema de circulación por la avenida Tibidabo. Siete años y medio después, sin embargo, la reforma continúa pendiente y los vehículos históricos, cerrados en la cochera.


Imagen principal: El Tramvia Blau de Barcelona con gente en la avenida Tibidabo: Foto: Garcia i Fernández, Germà 1942 - Digital Memory of Catalonia - CC BY-NC-ND