El Ayuntamiento de Barcelona ha dado un nuevo impulso a la pacificación de los entornos escolares de la ciudad con el inicio de obras en 73 centros educativos en el marco del programa Protegim les Escoles. Con estas actuaciones y las planificadas para 2023, el gobierno municipal llegará a un total de 217 escuelas, más que las 200 planificadas inicialmente. Según ha informado al Ayuntamiento este viernes, de esta manera miles de niños y niñas y familias dispondrán de un espacio urbano pacificado con un aire de más calidad, más espacios de encuentro y menos accidentalidad y ruido, aunque a menudo se ha tratado de intervenciones controvertidas por el uso del discutido urbanismo táctico.

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Según el Ayuntamiento, las intervenciones iniciadas ahora significarán una mejora importante del espacio que utilizan la comunidad educativa y el propio vecindario, ya que se traducirá en intervenciones para convertir 14 calles con prioridad para el peatón y eliminar dos carriles de circulación, y permitirán una ganancia de 16.000 m² de asfalto que pasarán a ser espacios de estancia con bancos y elementos de juego. Aparte, en 15 escuelas se ampliará la acera, en 5 se ganarán chaflanes y en 16 se harán actuaciones concretas vinculadas a la señalización y a la mejora del entorno, con elementos como nuevas jardineras, pasos elevados, semáforos y zonas de estancia.

Se prevé que las obras acaben en febrero, y se aprovecharán las vacaciones de Navidad para hacer los trabajos que afecten más el desarrollo normal de la actividad educativa. Además, durante el verano de 2023 se ejecutarán 17 actuaciones más. En total, se invertirá un presupuesto de 6,7 millones de euros en las mejoras de este 2022 y lo que viene y se llegará a los 80.000 alumnos beneficiados. El programa Protegemos las Escuelas arrancó en enero del 2020 con la primera pacificación en la Escuela Grèvol, en el distrito de Sant Martí. Los nuevos espacios que se han creado desde entonces permiten organizar mejor las entradas y salidas, y los vecinos y vecinas también hacen uso de las zonas ganadas.

El cambio de prioridades en el uso del espacio público que está viviendo la ciudad se habrá acentuado todavía más con esta iniciativa. En total, cuando se hayan ejecutado todos los entornos pacificados se habrá eliminado 16 carriles de circulación, se habrá pacificado 32 calles, se habrán hecho 68 ampliaciones de acera y se habrán ganado 30 chaflanes. Se habrá recuperado 35.000 m² de asfalto para espacios de relación y usos ciudadanos, y se habrán colocado 1.500 jardineras. En paralelo, durante el primer trimestre del 2023 también se harán actuaciones para mejorar y dar más calidad a diversas de las pacificaciones que se hicieron durante el 2020, 2021 y principios de 2022.