El pleno municipal del mes de mayo del Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado el nuevo reglamento de participación ciudadana que sustituye al anterior, aprobado en 2017 pero posteriormente anulado por el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) en octubre de 2019. La principal diferencia es el aumento sustancial del número de firmas necesarias para promover una consulta ciudadana, que ha pasado de las 15.000 iniciales a las actuales 88.709. El nuevo reglamento ha sacado adelante gracias a los votos favorables de los socios de gobierno, Barcelona en Comú y PSC, más ERC y Junts per Catalunya, mientras que el resto de grupos -Ciudadanos, PP y Valents- más la concejala no adscrita, se han abstenido.

En la defensa del nuevo reglamento, el concejal de Derechos de Ciudadanía, Marc Serra, ha lamentado "el incremento desproporcionado del número de firmas requerido", forzado para poder adaptarse a la sentencia del TSJC. De hecho, esta misma semana, sierra ya había indicado que el nuevo reglamento mantiene el 90% por ciento del anterior redactado, pero incorpora nuevos aspectos como la "participación telemática", universalizada durante la pandemia de la covid-19. Hay que recordar que después de aprobarse el reglamento en el 2017, la normativa recibió hasta 40 recursos, de los cuales se abrieron 10 contenciosos, y uno provocó que el tribunal catalán lo anulara, ya que aunque aceptaba que los ayuntamientos celebraran consultas, hacía falta que se sometieran a la normativa estatal y de conformidad con las legislaciones estatal y catalana.

En las intervenciones han destacado las palabras del portavoz de Junts, Jordi Martí Galbis, que ha recordado que su formación "desde siempre que está comprometida con las consultas", y ha puesto como ejemplo las jornadas del 9-N del 2014 y el 1-O del 2017. A la parte contraria, el portavoz de Ciudadanos, Francisco Sierra, ha recordado que la consulta ciudadana promovida por el ayuntamiento "con más participación fue la del tranvía por la Diagonal, que por un porcentaje mayoritario dijo que no lo quería". A esto, Sierra ha añadido, dirigiéndose al gobierno municipal: "y ustedes nos lo quieren poner con calzador".

Cambios incorporados

Entre los cambios del nuevo reglamento se incluye el hecho de que el Ayuntamiento podrá convocar consultas si consigue el apoyo de dos tercios del pleno y cambia la edad mínima de las personas que pueden participar, que podrá ser por debajo de los 16 si está justificado (hasta ahora se fijaba en 16 años), y se amplía el plazo para recoger firmas de dos a tres meses prorrogables hasta un mes más por causas justificadas. Por otra parte, consiguiendo el 50% del número total de firmas se tendrá derecho a la subvención correspondiente. Además, no se podrán formular consultas sobre materias sobre las cuales se esté ejecutando o tramitando algún tipo de contrato suscrito por el Ayuntamiento en caso de que se pueda producir perjuicios "de difícil o imposible reparación".