El líder del PP al Ayuntamiento de Barcelona, Josep Bou, se ha marcado el reto de conseguir retirar la pancarta con el lazo amarillo en apoyo a los presos políticos y exiliados que desde ayer vuelve a lucir en la fachada del consistorio barcelonés, y si hace falta, lo hará con las propias manos.

"Podemos tener un día de gloria", señaló Bou antes del retorno de la pancarta. "No lo permitiremos, o lo sacaremos. Si se coloca, haré todo lo posible para sacarlo, todo lo posible".

Hay que recordar que en campaña electoral, Bou, que es profesor de escalada, ya advirtió su voluntad de colgarse de la fachada del ayuntamiento para retirar personalmente el lazo amarillo.