En la construcción de la Sagrada Familia de Barcelona, la gran parte pendiente es la de la fachada de la Glòria, la que da a la calle de Mallorca y que, en el futuro, tiene que ser la entrada principal del templo expiatorio, precedida por una polémica escalinata que, según algunas proyecciones, supondría la expropiación de los vecinos que tienen sus domicilios en la acera de enfrente. Las obras en esta fachada ya han empezado, y ya se han realizado los cimientos de sus cuatro torres, que serán similares a las torres históricas de las fachadas del Naixement y la Passió, pero más altas, pero para poder continuar con la obra ha llegado el momento de instalar un andamio, cuyos trabajos de instalación ya han empezado y, de momento, han comportado la eliminación del carril bus en el tramo entre las calles Marina y Sardenya.
Tal como informó en su momento la Junta Constructora de la Sagrada Familia, en enero se pidieron los permisos necesarios para levantar un andamio que, una vez instalado, no tendrá que suponer ninguna alteración del tráfico ya que prevé que los peatones puedan transitar por un túnel habilitado por debajo del andamio. Ahora bien, en un cambio de planes no previsto inicialmente, los trabajos de instalación del andamio han comportado la supresión del carril bus, después de que las quejas vecinales han forzado a implementar un espacio para peatones sobre el trazado por donde circulaban los buses.
Hace falta tener en cuenta que el pasado 25 de marzo se instalaron vallas en la acera montaña de la calle Mallorca (ver imagen), con el propósito inicial de hacer pasar a los peatones por la acera mar, una acera ya lo bastante cargada habitualmente por la existencia de varias terrazas de locales de restauración, tiendas de souvenirs y los mismos vecinos que residen allí, que son los que alertaron del peligro de que los peatones, especialmente turistas, optaran por invadir la calzada, con el peligro que comportaría hacerlo en un carril bus. Ante esta circunstancia, finalmente se ha optado por eliminar el carril bus en este tramo y delimitar con barreras tipos New Jersey un paso para peatones. En principio, la instalación de la base del andamio, que irá creciendo conforme avance la obra de la fachada, tiene que alargarse unos dos meses, y una vez finalizada esta obra previa, se podrá recuperar el carril bus.
Un andamio para una década
Con respecto al andamio, una vez instalado, se prevé que se mantenga por un periodo aproximado de una década, el que se tardará a construir la fachada de la Glòria, como mínimo la parte autorizada actualmente, que es la que corresponde en la finca que ocupa el templo, ya que en el diseño de esta fachada se incluyen partes en voladizo, además de la escalinata, que quedan fuera del solar del templo y que necesitan permisos municipales con los cuales todavía no cuenta la Junta constructora.