La dramática caída de uso de la lengua catalana entre la juventud barcelonesa ha sido uno de los puntos principales de la Comisión de Derechos Sociales del Ayuntamiento de Barcelona, que ha tenido lugar este martes por la mañana, y que ha comportado que el gobierno municipal se haya posicionado en contra de priorizar el uso del catalán en un ámbito muy específico, el de los pregones de la Mercè. Tal como se anunció el lunes, ERC ha presentado una petición en la que pedía acciones claras por parte del gobierno municipal en favor de la lengua catalana. En concreto, la concejala Gemma Sendra pidió que "se priorice el uso del catalán en todos sus actos y acontecimientos públicos, profundos, grandes fiestas, actividades que programa sobre todo en actividades culturales en el marco educativo y en los barrios más vulnerables".

Ahora bien, a la hora de la verdad, el gobierno municipal ha rechazado la petición, especialmente porque especificaba como uno de los puntos a priorizar los pregones de la Mercè, que son tradicionalmente el pórtico de apertura de la fiesta mayor de Barcelona. Aunque según datos aportados por el teniente de alcaldía de Cultura, Jordi Martí Grau, en los últimos ocho años, el catalán se ha utilizado en cinco ocasiones, el gobierno municipal no ha querido admitir la petición por, según Martí, "no tener que priorizar personas en un acto simbólico", según declaraciones recogidas por Betevé. De hecho, Martí ha reclamado a Sendra que retirara la alusión expresa al pregón de la Mercè para admitir la petición, pero la concejala republicana ha considerado que no lo tenía que hacer porque ha defendido que el Ayuntamiento tiene la obligación de "actuar con sensibilidad" para "proteger una lengua, no prohibir ninguna otra".

En la misma comisión se ha rechazado una propuesta de Ciudadanos justo en sentido contrario, que reclamaba "reprobar la imposición de una lengua por encima de otra", pero no en el sentido que el castellano se impone al catalán de manera preocupante en todos los ámbitos sociales, sino en referencia directa a la petición de ERC sobre los pregones de la Mercè. De hecho, se ha estrenado en la propuesta la nueva concejala de Ciudadanos, Júlia Barea, que el lunes tomó posesión en sustitución de Luz Guilarte. A diferencia de las peticiones, que se aceptan o rechazan por parte del gobierno municipal, las propuestas se votan, y esta ha sido rechazada por los votos de ERC, BComú y Junts, y el voto favorable del PSC, Cs, PP y Valents.

La petición de ERC y la propuesta de Ciudadanos han llegado después de que se conociera que el uso del catalán cada vez es menos frecuente en Barcelona, y especialmente entre los jóvenes, entre los cuales no llega al 25% en la mitad de los distritos de Barcelona. Eso sí, el Ayuntamiento de Barcelona ha anunciado que impulsará un programa por revertir la situación con un conjunto de acciones de fomento del uso del catalán en la administración municipal, la educación, la salud, el comercio o la juventud y el ocio, según ha informado en un comunicado. El plan se concretará en diciembre a través de una medida de gobierno de fomento del catalán, en el marco de la colaboración con la Generalitat de Catalunya y será la aportación desde Barcelona al Pacte Nacional per la Llengua.