La Federació d'Associacions Veïnals de Barcelona (FAVB) ha denunciado este martes un incremento "inaceptable" de las terrazas de restauración en la capital catalana. A partir de las cifras publicadas por el Ayuntamiento de Barcelona en su portal Dades Obertes, la entidad asegura que, respecto del 2019, las mesas de las terrazas en la vía pública han aumentado un 62%. Según detallan, en el año 2019, antes del covid-19, había 4.217 licencias, con 18.774 mesas y 44.496 metros cuadrados de ocupación de las terrazas. En cambio, en 2022, la cifra de licencias aumentó hasta 6.501, es decir, 2.284 más. Asimismo, la cifra de mesas contabilizadas pasó a ser de 30.427, ocupando 31.306 metros cuadrados más. "Es una muy mala noticia que Barcelona supere ya las 30.000 mesas y los 75.000 metros cuadrados ocupados en aceras y una parte en calzadas por negocios privados", ha asegurado la entidad vecinal.
La FAVB ha expuesto que compara los datos del 2022 con los del 2019 porque durante los años de la pandemia estuvo vigente el decreto de alcaldía de mayo del 2020 para ayudar al sector de la restauración, que permitía medidas extraordinarias para instalar más terrazas en la ciudad. Ante este incremento de mesas y de licencias, la entidad vecinal de Barcelona ha denunciado que "la nueva ordenanza municipal ha facilitado e incrementado la masificación de terrazas". "Barcelona ya tiene una densidad de terrazas altísima, el triple que la ciudad de Madrid, por ejemplo", han asegurado.
Los vecinos señalan al Gremio de Restauración y al Ayuntamiento
Por otro lado, han señalado que el Gremio de Restauración ha conseguido "un 62% más de mesas, lo cual no había pasado nunca en la historia". En esta línea, han insistido en que "el trabajo de lobby del Gremio ha dado sus frutos" y que ahora tienen "casi el doble de espacio público ocupado por su negocio privado". Asimismo, la FAVB también ha apuntado al Ayuntamiento de Barcelona, asegurando que las observaciones que presentaron desde la entidad "no fueron atendidas por la dirección municipal". "A principios del 2023, el problema de saturación es mucho más grave que en el 2019, donde ya se veía una ocupación por encima de las posibilidades del espacio disponible en la ciudad", han reiterado.
La FAVB denuncia un aumento de problemas añadidos
Con esta interpretación de los datos, la entidad vecinal ha reclamado "una reconsideración de la ordenanza, en especial con respecto a las terrazas en calzada", y han advertido que prevén un nuevo incremento considerable de cara a los próximos años, "masificando y cronificando los conflictos, especialmente el del ruido". "En una Barcelona donde estamos reivindicando el espacio público para usos ciudadanos y para los peatones, las políticas municipales recientes desgraciadamente han facilitado este 62% de incremento de las terrazas privadas", han denunciado. Asimismo, han pedido "corregir esta situación", remarcando que la masificación "genera un gran número de problemas añadidos". En este sentido, han señalado un incremento del ruido, problemas de acceso a portales, desaparición del comercio de proximidad, malos olores e incremento de la inseguridad, entre otros.