Las fachadas del complejo de edificios que forman el Museu Picasso de Barcelona entrarán en un proceso de rehabilitación que se iniciará este verano, una vez la Comisión de Gobierno del Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado el proyecto para las obras de restauración. La propuesta prevé intervenciones en el conjunto de los edificios que conforman el Museu Picasso: los palacios Berenguer d'Aguilar y Meca y las casas Baró de Castellet, Mauri y Finestres, así como las fachadas de los patios de luces no abiertos al público. La ejecución de las obras se hará en cinco fases y está previsto que las obras de la primera comiencen en verano de este año y tengan 11 meses de duración.

Según ha informado el ayuntamiento, el proyecto incluye un estudio previo del estado de los paramentos de las fachadas para identificar las patologías, determinar las causas y llevar a cabo las actuaciones necesarias para su reparación. Como el Museu está formado por cinco immuebles, con orígenes y características arquitectónicas diversas, se ha realizado un estudio histórico para definir con rigor las actuaciones a realizar para recuperar al máximo la esencia original del conjunto. De esta manera, el proyecto adapta las soluciones propuestas a las patologías existentes, teniendo en cuenta su composición y origen, determinando la futura imagen del conjunto urbanístico protegido de la calle Montcada.

Así, las actuaciones a desarrollar permitirán recuperar o reinterpretar la apariencia de las fachadas, según cada caso, garantizando su durabilidad y consolidando la imagen histórica del conjunto. De esta manera el proyecto servirá para culminar las actuaciones de restauración y actualización de las instalaciones del museo que se iniciaron el mes de octubre de 2021 con la intervención de las fachadas de los patios del Palau Berenguer d'Aguilar y del Palau Meca. El próximo mes de abril empezarán las obras en los patios de la Casa del Baró de Castellet y la Casa Finestres. De esta manera, los cuatro patios quedarán completamente restaurados y abiertos al público en noviembre del 2022.

Un museo en cinco edificios

Desde su apertura en el Palau Berenguer d'Aguilar en 1963, el espacio del museo se ha ido ampliando con la incorporación de los palacios adyacentes: primero la Casa Baró de Castellet, en 1970; el Palau Meca, en 1981; y la Casa Mauri y la Casa Finestres en 1999. Los diferentes edificios siguen la estructura propia de las construcciones góticas, organizada en torno a patios, aunque fueron reformadas en posteriores ocasiones. En la actualidad, el conjunto cuenta con una superficie total construida de 10.936 m². En el año 2003 se hizo la última intervención arquitectónica, con la articulación de un gran bulevar en la planta baja de los cinco palacios, paralelo a la calle de Montcada, y de un eje transversal que lo cruza perpendicularmente desde la calle hasta el jardín posterior, conformando un espacio de acceso público abierto a la ciudad.

Palau Berenguer d'Aguilar, calle Montcada, 15

A pesar de los vestigios conservados de los siglos XII y XIV, el Palau Berenguer d'Aguilar fue rehecho en el siglo XV, convirtiéndose en ejemplo de arquitectura gótica. Es un volumen de 19 m de anchura y profundidad de 39 a 60 m, de planta baja y tres plantas, organizado alrededor de dos patios; el principal cuenta con una escalera monumental de acceso a la planta primera y una galería perimetral. El patio secundario parte de la planta primera y actualmente no es accesible al público.

Casa del Baró de Castellet, calle Montcada, 17

Se trata de una casa del siglo XVIII y que ha sufrido varias actuaciones a lo largo de su historia. Se desarrolla en planta baja y tres plantas y se organiza alrededor de dos patios. El secundario se inicia en planta segunda y contiene una fuente monumental en el centro; no es de acceso público. El edificio tiene una anchura de 15 m y una profundidad edificada de 47 m. La parte posterior prácticamente no tiene contacto con el exterior, ya que queda entre los edificios de los números 15 y 19.

Palau Meca, calle Montcada, 19

Aunque se tienen datos desde el siglo XIV y que se han descubierto vestigios medievales, el edificio del Palau Meca es una construcción básicamente de época barroca. De 22 m de ancho y 56 de profundidad, se despliega en planta baja y tres plantas en la calle Montcada y dos plantas piso en la fachada posterior. Se estructura en torno a dos patios; el principal es de amplias dimensiones y cuenta con una escalera a la catalana. El patio secundario se inicia también en planta baja y no es de acceso público.

Casa Mauri, calle Montcada, 21

Se trata de una construcción barroca del siglo XVII. Con 10 m de anchura y 32 m de profundidad, se desarrolla en planta baja y dos plantas y no tiene un patio propio, sino que comparte el del edificio del número 23.

Casa Finestres, calle Montcada, 23

Es una de las casas más antiguas de la calle Montcada, con fachada y escalera del siglo XIV y algunas partes de la construcción que podrían remontarse al XIII. Sin embargo, ha sufrido numerosas reconstrucciones. Con una anchura de 15 m y profundidad de 32 m, se despliega en planta baja y dos plantas. Se organiza en torno a un patio que contiene una escalera monumental de acceso a la primera planta.