Los comunes solo entrarán en el gobierno municipal de Barcelona si también lo hace ERC. Así lo ha confirmado el portavoz de BComú, Jordi Martí, que confía en que los republicanos se acaben sumando al "gobierno de izquierdas de Barcelona" por las coincidencias programáticas con los comunes y con el PSC, en tanto que partidos progresistas. En una entrevista este martes en betevé, Martí ha asegurado que se siguen poniendo como condición que haya un acuerdo de izquierdas. "El voto en Collboni es un mal menor, no sabemos si nos encontraremos el Collboni que solo apostará por ampliar el aeropuerto y hacer crecer el turismo o nos encontraremos al que gobernó con nosotros". Las declaraciones de Martí se produjeron después de que el alcalde socialista abriera la puerta a la entrada de los comunes en el gobierno municipal.

Un gobierno sólido con un tripartito de izquierdas

Jordi Martí ha admitido la parte de responsabilidad de su partido en el movimiento para evitar un gobierno independentista en 2019 y ahora, precisamente, ha atribuido la responsabilidad al mismo líder de ERC, Ernest Maragall, porque siempre prioriza este acuerdo entre soberanistas "aunque sea con la derecha", un hecho que ha considerado un "error histórico". Para el portavoz de los comunes, Barcelona es una ciudad "progresista", y por eso el tripartito PSC-BComú-ERC permitiría, con 24 concejales, un gobierno "sólido".

El portavoz de los comunes, considera que en este momento conviene dejar pasar la vorágine electoral—en el contexto de la campaña para el 23-J— y después se podrá empezar a hablar sobre el posible pacto de izquierdas en el Ayuntamiento de Barcelona. "ERC tiene una enorme coincidencia programática con nosotros. Si entendieran que esta ciudad es progresista, encontraríamos la manera de ponernos de acuerdo". De hecho, Martí ha recordado que después de que en 2019 Maragall ganara las elecciones, pero no pudiera llegar a la alcaldía por la investidura alternativa de Ada Colau con los votos de Manuel Valls, "tres semanas después estábamos pactando los presupuestos". Martí ha reiterado que la voluntad de los comunes no es entrar en el gobierno, sino formar este tripartito de izquierdas.

Investidura de Collboni como alcalde de Barcelona

Martí también habló en una entrevista a Ràdio 4, donde explicaba que la decisión de investir Collboni como alcalde se tomó en el último momento y que los comunes se replantearon su posicionamiento después de constatar que el pacto entre Junts y ERC podía prosperar y que los republicanos habían decidido "priorizar" un acuerdo con la antigua convergencia. "Cuando vemos que Ernest Maragall ha decidido entregar la alcaldía a Xavier Trias y ser su primer teniente de alcalde, es cuando aparecen los cambios de opinión", ha señalado. Así, ha defendido que se mantuvieron reuniones viernes por la tarde y sábado por la mañana y que hasta el último momento la apuesta de los de Colau dependía de forjar un gobierno de izquierdas conformado por PSC, ERC y BComú.

Sobre las declaraciones que hizo el jueves en que aseguró que los comunes no participarían en ningún pacto que incluyera el PP, ha dicho que la política "avanza a toda prisa" y que BCcomú se encontró en la disyuntiva de entregar la ciudad a Trias o regalar sus votos a Collboni. "No nos gusta como alcalde, pero era el mal menor", ha reconocido Martí, que ha dicho que esta era la única vía de ser "fieles y útiles" a los 130.000 electores que el pasado 28 de mayo confiaron en los comunes y expresaron su voluntad que el modelo de ciudad liderado por Colau continuara.