La muerte del arquitecto Ricard Bofill Levi a los 82 años deja Barcelona y Catalunya sin uno de sus grandes arquitectos, de hecho lo que ha tenido más proyección internacional después de Antoni Gaudí, y se suma a la reciente pérdida de Oriol Bohigas. Su legado en la ciudad toma la forma de edificios de sobras conocidos como el Hotel Vela (o W Barcelona), el Teatre Nacional de Catalunya (TNC) o el edificio de la INEFC, a los cuales hay que sumar algunos hechos bien cerca de la capital de Catalunya, en especial el paradigmático Walden 7 de Sant Just Desvern.

La huella de este arquitecto, que tiene obra en Andorra, Madrid, Tokio, Chicago, Praga, Luxemburgo, Casablanca, Houston, Burdeos, París y Montpellier, entre muchos otros lugares, también se puede observar en edificios de viviendas como los situados en las calles Nicaragua, 97-99, y Johann Sebastian Bach, 28, de Barcelona.

ricardo bofill efeRicard Bofill, delante de la maqueta del edificio Ikon de València, en una imagen del 2019 / Efe

A continuación, una selección de cinco obras situadas en Barcelona y alrededores (Baix Llobregat y Garraf), que suponen una mirada rápida a la obra de Bofill, claro representante del estilo posmoderno de la arquitectura contemporánea. Entre ellos destacan los que hizo con el Taller de Arquitectura, fundado en 1963 y que contaba con un equipo multidisciplinar formado no sólo por arquitectos, sino también por otros profesionales y artistas, como el crítico literario Salvador Clotas, el poeta José Agustín Goytisolo y la economista Julia Romea.

Teatro Nacional de Catalunya (TNC)
Barcelona
Cinco edificios de Ricard Bofill en Barcelona y alrededores

El Teatre Nacional de Catalunya (también conocido como TNC) es la obra de estilo clásico más singular de Ricard Bofill. Se empezó a construir en 1991 y fue inaugurado en 1996 en un nuevo complejo cultural que incluye también el Auditori. Bofill escogió una fachada principal a modo de templo clásico grecorromano, con una escalinata señorial que agranda los volúmenes e imita un espacio de encuentro al estilo de las ágoras griegas. La Sala Gran, con capacidad para 847 butacas, tiene la disposición de un anfiteatro griego, en otra proyección del estilo clásico en un edificio moderno. La primera obra que se representó fue Àngels a Amèrica, bajo la dirección de Josep Maria Flotats.

Edificio del Teatro Nacional de Catalunya vista cónica foto José María Rodríguez Rodríguez

Fachada neoclásica del Teatre Nacional de Catalunya / José María Rodríguez Rodríguez

Hotel Vela
Barcelona
Cinco edificios de Ricard Bofill en Barcelona y alrededores

La obra más representativa de Bofill en la capital de Catalunya es el W Barcelona, más conocida como Hotel Vela, que desde el 2009, año de la inauguración, cuenta con un lugar destacado en el skyline barcelonés. Fue empezado a ser construido en el 2004 en el ámbito de la nueva bocana del puerto, bien cerca del solar que espera por si algún día llega a construirse el Hermitage. Con 99 metros de altura —Bofill lo quería de 160— no es de los más altos de la ciudad, pero su singular figura lo convierte en fácilmente identificable. Recibió el primer premio de los Prix Villégiature el año 2010 en la categoría de Mejor Arquitectura Exterior de Hotel de Europa.

Hotel Vela ACN

El Hotel Vela, integrado en el skyline de Barcelona / ACN

Walden 7
Sant Just Desvern
Cinco edificios de Ricard Bofill en Barcelona y alrededores

Este edificio de apartamentos modulables es uno de los trabajos primordiales de Bofill en el contexto del grupo de trabajo multidisciplinar Taller de Arquitectura. Construido entre 1973 y 1975 en Sant Just Desvern (Baix Llobregat) en los terrenos de una antigua fábrica de cemento, destaca por su volumetría exterior y su composición interior, hecho a partir de módulos de 30 metros cuadrados conectables entre sí. Concebido más como un barrio vertical que un simple edificio de viviendas, en el Walden 7 en la actualidad viven un millar de vecinos. La construcción huye del gris mediocre de los habituales bloques de edificios construidos durante el tardofranquismo para convertirse en todo un ejercicio de imaginación y practicidad. En el año 1995 fue rehabilitado.

Walden 7 edificio Jordiferrer

Imponente estructura del Walden 7 de Sant Just Desvern / JordiFerrer

Aeroport del Prat
El Prat de Llobregat
Cinco edificios de Ricard Bofill en Barcelona y alrededores

La huella de Ricard Bofill en el Aeroport del Prat es visible en las dos terminales. En la primera, actualmente T2, Bofill fue el encargado de su modernización y ampliación de cara a la celebración de los Juegos Olímpicos de 1992. Asimismo, el arquitecto diseñó la nueva torre de control, inaugurada en 1996. Con respecto a la nueva terminal o T1, inaugurada en el 2009, Bofill fue responsable de su diseño, con la conocida forma de espada que permite la conexión directa del máximo de aviones posibles en el mínimo espacio. La nueva terminal permitió aumentar la operativa del aeropuerto hasta una punta de 90 vuelos por hora.

T1 del Aeropuerto de Barcelona El Prat foto Pop9000

Interior de la Terminal 1 del Aeropuerto del Prat / Pop9000

Castillo de Kafka
Sant Pere de Ribes
Cinco edificios de Ricard Bofill en Barcelona y alrededores

En este trabajo previo al Walden 7, Bofill y el Taller de Arquitectura ya dieron pistas de la capacidad de hacer una arquitectura posmoderna al mismo tiempo rompedora y útil. Se trata de un edificio de apartamentos situado en Sant Pere de Ribes (Garraf) finalizado en 1968 y que, más allá del homenaje a una de las obras de Franz Kafka, se singulariza por su diseño de cubos prefabricados y modulables que acoge un complejo de 90 apartamentos además de equipamientos como piscina, sauna, bar y restaurantes. Los cubos del Castillo de Kafka se obtienen a partir de ecuaciones matemáticas que generan a su vez las conexiones con el resto de estructuras y generan la composición final.

Kafka Castle Sitges Barcelona Spain Ricardo Bofill Taller Arquitectura 05 1434x1440 foto RBTA

El Castillo de Kafka toma su forma a partir de cubos / RBTA