Relajación con los pisos turísticos. El Ajuntament de Barcelona aprobará una instrucción para ajustar las sanciones relacionadas con la actividad ilegal de vivienda de uso turístico, con el objetivo de adaptar las multas a la realidad de las personas que han alquilado el piso de manera ocasional y esporádica.
La medida tiene en cuenta aspectos como la reincidencia, el número de alojamientos comercializados o la situación económica de la persona infractora a la hora de aplicar unos criterios comunes en los procedimientos sancionadores. Así, las infracciones muy graves que podían llegar a los 600.000 euros, se pueden llegar a considerar sólo graves para reducirlas a 6.001 euros si se acreditan una serie de condicionantes, como la situación de vulnerabilidad. Si se detectan agravantes, en cambio, se incrementarán.
La medida podría beneficiar 200 casos
Los nuevos criterios llegan después de que el Ayuntamiento haya detectado "un problema específico" en situaciones de particulares que se tenía que resolver. En concreto, han contado unos 200 casos que se podrían beneficiar de la medida. "Tenemos que diferenciar entre quién utiliza esta posibilidad de manera puntual porque ha tenido una necesidad y las redes organizadas o quién tiene tres pisos y alquila uno como alojamiento turístico y dice que está empadronado", ha destacado a la teniente de alcaldía de Urbanismo, Janet Sanz.
De esta manera, la actualización de criterios se aplicará a las nuevas sanciones que se impongan a partir de ahora. Asimismo, se revisarán las multas de los últimos años para moderarlas.
9.077 sanciones desde 2016
Fue el año 2016 cuando el Ayuntamiento puso en marcha un plan de choque contra el descontrol en la ciudad de pisos turísticos irregulares, en un momento que las plataformas de alquiler turístico tenían publicados más de 6.000 anuncios de viviendas sin licencia. Desde entonces, se han interpuesto 9.077 sanciones.
El importe de las multas iba de los 30.000 a los 300.000 euros, hasta enero de 2017, cuando se produjo un cambio normativo en el ámbito catalán. En este momento la cifra aumentó de 60.001 a 600.000 euros. Las sanciones se podían rebajar de forma concreta para cada expediente, si en el proceso de tramitación de los expedientes se justificaba alquiler ocasional o situación de vulnerabilidad. La nueva instrucción establece ahora unos criterios comunes en los procedimientos sancionadores.
La teniente de alcaldía de Urbanismo, Janet Sanz / ACN
Desde 2016, el Ayuntamiento de Barcelona ha identificado un problema con aquellas personas que alquilan el piso de forma ocasional para completar los ingresos, pero que tienen que afrontar sanciones muy elevadas y desproporcionadas. Además, muchos de los infractores eran vecinos que actuaban pensando que ofrecer vivienda para estancias cortas era una actividad legal. Una idea promovida por las mismas plataformas de alquiler.
Los importes mínimos de las sanciones se determinan de acuerdo con la Ley de turismo de Catalunya, que tipifica como infracción muy grave el hecho de comercializar o hacer publicidad de actividades o servicios turísticos sin la habilitación correspondiente.
Imagen principal: Un balcón con un cartel contra los pisos turísticos / ACN