El Ayuntamiento de Barcelona quiere dar una mejor imagen de la ciudad, y a seis meses de las elecciones municipales ha anunciado una nueva campaña que empezará este mes de diciembre con la finalidad de renovar la señalización vertical de la ciudad y otros elementos viarios. Según ha anunciado el propio Ayuntamiento, las intervenciones consisten en el cambio y sustitución de señales en mal estado, en condiciones incorrectas de visibilidad u obsoletas por otros con mejor diseño y visibilidad y con condiciones de reflectancia actualizadas. También habrá intervenciones en separadores de carril bus y bandas reductoras de velocidad. Los trabajos se dividirán en dos lotes con cinco distritos cada uno.

El primero de los dos lotes incluye las obras que se harán en los distritos de Ciutat Vella, el Eixample, Sants-Montjuïc, las Corts y Sarrià-Sant Gervasi, por un importe de 413.459 € (IVA incluido) y durante un periodo de 6 meses; el segundo incluye las obras que se tendrán que hacer en los distritos de Gracia, Horta-Guinardó, Nou Barris, Sant Andreu y Sant Martí, por un importe de 399.822 € (IVA incluido) también con una duración de 6 meses. Durante este periodo se trabajará simultáneamente en los dos ámbitos mencionados. En total se incorporarán 3.712 nuevas señales de tráfico. Entre las intervenciones previstas está la sustitución de señales de chapa de acero por señales de aluminio y con un mayor nivel de reflectancia.

Asimismo, se prevé la renovación de señales por señales fosforescentes y la mejora de señales informativas para vehículos y para peatones, incorporando indicaciones más esclarecedoras en algunos casos o nuevas señales en ámbitos donde no las había. Otra de las intervenciones consistirá en la sustitución de señales de 60 cm de diámetro instalados en las fachadas y en los semáforos por unas de 40 cm. La actuación se hará en calles pacificadas donde no es necesario que las señales sean de mayores dimensiones porque se circula a una velocidad menor. La intervención permitirá disminuir el impacto en el paisaje urbano y al mismo tiempo evitar que estos elementos se estropeen más rápidamente por desperfectos que los puedan ocasionar impactos con vehículos de grandes dimensiones (camiones, furgonetas, etc...).

Separadores de carril bici

En el marco, de esta actuación también se llevarán a cabo dos intervenciones más sobre elementos viarios que consistirán en la renovación de 1.235 separadores de carriles para bicicletas por desgaste del reflectante del mismo separador y en la renovación de 380 bandas reductoras de velocidad, también por desgaste del reflectante. La medida pretende incrementar la seguridad vial en la ciudad, mejorando las condiciones de la señalización en las calles de Barcelona. El gobierno municipal tiene entre sus prioridades la reducción de los siniestros de tráfico en la capital catalana y por este motivo trabaja de manera transversal y desde diferentes frentes para disminuir los accidentes. Según el consistorio, la mejora de la señalización es un elemento clave para poder incidir y por este motivo se apuesta para incrementar la visibilidad y reforzar su función.