El transporte público se encarece en Barcelona de cara a 2024. Este martes por la noche la Autoridad del Transporte Metropolitano (ATM) ha aprobado un incremento de las tarifas del 6,75% a partir del 1 de enero. El Consejo de Administración de lo ATM ha acordado la subida de precios este martes después de mantenerse congelados desde el 2020, aunque también se ha aprobado seguir aportando su parte para que los títulos que utilizan los usuarios habituales del transporte público, es decir, la T-Usual y la T-Jove, puedan seguir rebajados a mitad de precio, como ya ha sido el último año. Este encarecimiento se justificaría en la necesidad de los operadores de actualizar las tarifas ante el incremento de precios como los carburantes y la electricidad y también para reducir el impacto en el déficit crónico que sufre el transporte público en Catalunya.

Los precios del transporte público se mantenían congelados desde el 2020: después de que la crisis del coronavirus hiciera caer en picado a los usuarios, los años siguientes se decidió mantener las tarifas. Por otra parte, desde septiembre del 2022, los usuarios de la T-Usual y la T-Joven experimentan un abaratamiento notable, pagando solo la mitad del precio original para hacer frente a la crisis energética y económica derivada de la guerra de Ucrania. En el caso de la T-Usual y la T-Jove esta bonificación se ha mantenido hasta ahora, mientras que para la T-Casual el descuento solo duró cuatro meses. Esta reducción es factible gracias a una bonificación estatal del 30% y a la contribución adicional del ATM, que cubre el 20% restante. El ATM ha confirmado que mantendrá su aportación financiera, y aunque Pedro Sánchez ya se comprometió a seguir la misma línea durante el debate de investidura, todavía no se ha formalizado a través de ningún Consejo de Ministros.

Caducidad el 29 de febrero

Las tarjetas de transporte público del ATM, es decir, las que sirven principalmente para viajar a las redes de Metro, Bus, FGC y Tram, adquiridas este 2023, tienen la fecha de caducidad fijada para el 29 de febrero del 2024, es decir, en la fecha habitual. Inicialmente, el ATM había previsto la caducidad para el 15 de enero, pero posteriormente la alargó hasta finales de febrero, la fecha habitual siempre que hay un cambio de tarifas, para "garantizar un mayor margen de adaptación de los usuarios en su transición hacia títulos T-Mobilitat". Hay que tener en cuenta que estas semanas se está llevando a cabo el proceso de cambio del sistema de bitlletaje, por el cual las tradicionales tarjetas con banda magnética desaparecerán y serán sustituidas por la T-movilidad, ya sea en su formato de tarjeta de plástico o como aplicación en el teléfono móvil, o con las nuevas T-movilidad de cartón.