¿Será posible vivir 120 años en España dentro de dos décadas? El doctor Manuel de la Peña no tiene dudas. Este cardiólogo y especialista en longevidad asegura que la medicina, unida a los hábitos diarios, abrirá una etapa donde alcanzar esa edad no será una excepción, sino una norma.

Para el médico, el secreto no está solo en la ciencia, sino en el día a día. La genética apenas influye un 25 % en cuánto tiempo vivimos. El resto, un 75 %, depende de nuestra forma de cuidarnos. Dieta equilibrada, actividad física, descanso reparador y gestión emocional son las piezas fundamentales. Sin atajos. Sin milagros. Solo disciplina y constancia.

alimentación saludable
Alimentación saludable

La vida eterna, cada vez más cerca

Estas ideas las desarrolla en su libro Guía para vivir sanos 120 años. Allí analiza casos reales y se inspira en las zonas azules del planeta. Son regiones como Cerdeña, Okinawa o Nicoya, donde abundan los centenarios. Según De la Peña, no es casualidad: comparten rutinas de vida sencillas, vínculos sociales sólidos y una alimentación natural.

El especialista, además, dedica parte de su tiempo libre a visitar a los llamados supercentenarios españoles. Escucha sus vivencias, estudia sus costumbres y descubre que los pequeños detalles marcan la diferencia. No se trata de estadísticas, insiste, sino de personas de carne y hueso que han logrado vivir más de un siglo en buena forma.

Ejemplos hay varios. María Branyas, que alcanzó los 117 años, hablaba de dos reglas claras: un yogur al día y evitar la toxicidad en las relaciones. También está el caso de Silveria Martín, fallecida con 114 años, cuya serenidad impresionaba al cardiólogo. Historias como estas, asegura, confirman que la longevidad tiene mucho de elección personal.

deporte y salud mental
deporte y salud mental

Varios factores marcan nuestra esperanza de vida, y no solo llevar una alimentación saludable

España, según De la Peña, parte con ventaja. Contamos con la Seguridad Social, que considera la mejor del mundo. Tenemos la dieta mediterránea, rica en pescado, aceite de oliva y verduras. Y aún conservamos un fuerte apoyo familiar, clave para el equilibrio emocional. Todo ello configura un terreno fértil para vivir más y mejor.

El reto es eliminar esos enemigos invisibles. El tabaco, el exceso de azúcar, el sedentarismo y el abuso de alcohol acortan la vida. En cambio, caminar cada día, cuidar el sueño y mantener la mente activa prolongan no solo los años, sino la calidad de esos años. El médico lo resume así: no se trata de sumar tiempo, sino de llegar al 2045 con 120 años… y con ganas de seguir disfrutando.