Era cuestión de tiempo. El supuesto "rechazo" de la Liga de Fútbol española a los insultos contra los jugadores es sesgado y teledirigido por su cúpula. Cúpula ultra, claro está. Javier Tebas, reconocido simpatizante de extrema derecha y exmilitante de Fuerza Nueva, considera mucho más grave que el público le llame "nazi" a un nazi, que los insultos racistas, machistas, homófobos y repugnantes contra deportistas que participan en la competición. Si alguien pensaba que tras de la suspensión del Rayo Vallecano-Albacete la Liga erradicaría la violencia verbal en los estadios, se equivocaba. Sólo le preocupa ofender los sentimientos de unos escogidos: intolerantes, patrioteros y ultras como él. Ahora bien, si el objetivo de los ataques son jugadores como Gerard Piqué, ni suspender partidos, ni mandangas. Barra libre.

Javier Tebas EFE

Javier Tebas EFE

Según muchos usuarios de la red, Piqué tuvo que soportar el pasado sábado este recibimiento en el campo del Espanyol (por parte de ultras): "C..., tú madre tiene r..., tú hijo es de Wakaso y tú eres m....". ¿Alguien detuvo el partido? ¿Dónde está la sensibilidad de árbitros o mandatarios de la Liga? Muchos lo sabemos: No existe. Sólo saltan cuando les llaman por su nombre, como Roman Zozulya, por mucho que haya ofrecido inverosímiles aclaraciones sobre su "pasado". La cara del fútbol español es de cemento, y ha hecho indignarse a miles de espectadores. Algunos, como el actor vasco Gorka Otxoa, utilizan la ironía (uno de sus puntos fuertes) para retratar a los estamentos futbolísticos, que prefieren vilipendiar a gais, mujeres y razas diversas antes que seguidores de un régimen fascista y asesino.

Gorka Otxoa @gorkaotxoaoficial

Gorka Otxoa @gorkaotxoaoficial

Gerard Pique Darder Espanyol Barca EFE

Gerard Piqué EFE

Ser nazi en España parece está protegido. Ser catalán, o negro, u homosexual, o simplemente ser mujer es suficiente para tener que aguantar ataques burdos e infames. La próxima vez, Gerard, vete del campo. Sólo así aprenderán. O no.