Risto Mejide y Laura Escanes ya hace demasiados años que viven en el puente aéreo entre Barcelona y Madrid. Laura siempre ha querido que su hija Roma aprenda el catalán y ella misma publica cómo lee cuentos en esta lengua y como se dirige a ella siempre en la lengua materna. Ahora bien, los retos profesionales, sobre todo de Risto, están en Madrid. Las idas y venidas en tren o avión les ha llevado a estar hartos y, de momento, han decidido abandonar una de las dos ciudades: la escogida ha sido Barcelona.
"Dejamos el piso definitivamente". Esta es la respuesta que ha dado Escanes a una de sus amigas que le ha preguntado por privado si volvían a cambiar de piso. Pero parece que, esta vez, el gran cambio es el despido de la ciudad barcelonesa.
Desconocemos si la intención es comprarse una nueva vivienda pero, de momento, la misma Escanes ha confirmado que hacen las maletas. De hecho, este fin de semana está de mudanza y está muy ajetreada haciendo paquetes, recogiendo ropa, desmantelando los muebles y dejando intacto el piso que, seguramente, pondrán en venta.
Pero no dejan Catalunya. De hecho, son unos enamorados de la Cerdanya y Escanes ha celebrado que desde esta semana ya se operen vuelos directos entre Madrid y la Seu/Andorra, un aeropuerto que hará las delicias de aquellos enamorados del esquí que para llegar en coche se pueden pasar un día entero. Laura, a pesar de su juventud, prioriza la vida familiar y tranquila. Por eso, de los dos, es quien más insiste en pasar muchos fines de semana cerca de la chimenea.
También es una enamorada de los Países Catalans. Durante el invierno, podemos ver a esta familia por la Cerdanya y cuando llega el verano, hacen las maletas y se van hacia Menorca. Ella no puede pasar ningún verano sin hacer una parada obligatoria en esta fantástica isla. Alquilan un barco y guardan muchos recuerdos en Ciutadella, uno de sus puntos de referencia aunque también se dejan llevarse por la gastronomía balear.
