La relación entre Kate Middleton y el príncipe Harry, junto con Meghan Markle, ha sido motivo de atención. Durante la estadía del príncipe Harry y su esposa en Inglaterra, se percibía una tensión evidente en la relación entre los tres miembros de la familia real. A medida que los duques de Sussex optaron por mudarse a Estados Unidos, esta tensión aparentemente persistió e incluso se intensificó. La distancia entre ellos no parece haber aliviado las tensiones, sino que posiblemente ha contribuido a empeorar la relación entre Kate Middleton y la pareja exiliada.

La mudanza del hijo menor del rey Carlos III y Meghan a Estados Unidos, así como su separación de la vida activa en la realeza británica, puede haber incrementado las diferencias y las dificultades en su relación con Kate Middleton, y no solo con ella, sino también con el príncipe Guillermo. La distancia física y las diferencias en estilo de vida y perspectivas pueden haber contribuido a esta falta de cercanía por parte de un bando y otro, y sabemos algo preciso, y es que la princesa de Gales no quiere ver a Meghan Markle ni en pintura. 

Por esta razón la esposa del príncipe Guillermo no quiere ver a la ex actriz de Suits

La relación entre Kate Middleton y Meghan Markle nunca ha sido la mejor del mundo, y parece que las diferencias entre ellas han contribuido a una distancia cada vez mayor. De hecho, Kate Middleton ha expresado su desinterés en mantener una relación con Meghan debido a estas diferencias. El hecho de que Meghan Markle no haya contactado a la esposa del príncipe Guillermo cuando esta anunció su lucha contra el cáncer podría interpretarse como un indicio adicional de la tensión entre ellas. Esta falta de comunicación en un momento tan difícil ha dejado más que claro la falta de cercanía entre las dos.

Pese a esto, Kate Middleton no quiere ver a su cuñada porque busca la protección de su propia salud. Al poner límites en sus interacciones con Meghan Markle, la princesa de Gales está priorizando su bienestar emocional y concentrándose en su salud y recuperación, y esto mismo lo ha dicho ella. No quiere nada que la altere y por eso prefiere tener lejos a la esposa del príncipe Harry. La decisión de Kate Middleton de mantener distancia de Meghan Markle parece ser una forma de protegerse a sí misma, pues en el pasado ha quedado demostrado que las dos no pueden estar juntas.

La futura reina de Reino Unido quiere estar lo mejor posible

Dada la situación de la princesa de Gales, todo lo que quiere es mejorar y poco más, así que está haciendo de lado todo aquello que pueda afectarle a nivel emocional y físico. Todo para tener una recuperación más pronto, y seguir su vida con normalidad tal como lo hacía antes.