El día de Todos los Santos es tradición ir a los cementerios a honrar a los difuntos antes de comer panellets y castañas. Ahora bien, parece que la reina Letizia prefiere disfrutar del día festivo de una manera bien diferente. Tiene que ver con comida, eso sí, aunque no hablamos de comida tan dulce...
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Vanitatis ha pillado a la monarca pasando el primer día de noviembre en una feria alimenticia. Biocultura es uno de los acontecimientos que nunca se pierde, ya que el año pasado también quiso asistir. Pero ¿en qué consiste? Es una feria de productos ecológicos y consumo responsable que se celebra en Madrid entre el 1 y el 4 de noviembre.
Es conocida por mucho la obsesión de Letizia por la comida sana, y de hecho, se dice que modificó el menú de la escuela de sus hijas para incorporar una mentalidad saludable. Adiós fritos, hola verduritas. Además, fue una de las impulsoras de las jornadas sobre educación nutricional del colegio, en las que algunos profesionales hablaron a los niños sobre la importancia de tener una buena alimentación para evitar enfermedades.
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Es por eso que no extraña imaginarse a la monarca informándose de las novedades de este mundo. El medio añade que algunos testigos la vieron especialmente interesada en puestos que promocionaban maquillajes y otros productos de belleza. Habría ido medio camuflada para que no la reconocieran, pero sus esfuerzos no han servido de mucho, ya que ha acabado trascendiendo su escapada.
¿Habrá aprovechado para comprar alguna cosa a la reina Sofía? La monarca está invitada a la fiesta de cumpleaños de su suegra, con lo que seguramente le habrá hecho algún regalo. ¿O las cosas entre ellas están tan tensas que no ha tenido ni este detalle?