Entre todos los Borbones sólo hay uno que queda siempre al margen de la crítica: la reina Sofía. La octogenaria está pasando la epidemia confinada en Zarzuela y según fuentes de Palacio lo hace en el mismo edificio, sin coincidir con su todavía marido. Juan Carlos tiene prohibido salir del recinto y el exilio a lo que lo ha enviado su hijo tendrá que esperar. Jaime Peñafiel no se cree el papelón de la reina durante todos los años de amantes, comisiones y evasión fiscal de su marido y le dedica una columna en el digital Republica.com.
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La reina aguantó estoicamente ser la mujer con más cuernos de España y miraba hacia otra lado para no ver las infidelidades constantes de su marido. La imagen para ilustrar lo que dice Peñafiel es casual. La segunda esposa de Felipe González, Mar García Vaquero coincidió con el rey en un funeral y Juan Carlos se le balanza mientras la reina hace que no ve nada. La foto es sólo un símbolo de los 60 años de casados. Jaime Peñafiel se harta de la "inocente y pánfila Sofía" y escribe: "No podemos dejar a la reina Sofia quien, cuando conoció las infidelidades de su esposo, decidió, porque así le convenía, mirar para otro lado no pidiéndole fidelidad sino lealtad. Soportando las humillaciones públicas que una mujer, sea o no reina, no debe tolerar".
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Juan Carlos tapó la boca de su mujer manteniéndole el estatus, económico e institucional. Sofía no estaba obligada a seguir casada porque puede dejar de ser la mujer de un rey pero nunca dejará de ser la madre de un rey. A sus 81 años no ha protestado nunca. Peñafiel afirma que los culpables del comunicado que expulsa a Juan Carlos de la Família Real son tres: Sofía, Felipe y Jaime Alfonsín, jefe de la Casa Real: "Alfonsín es responsable de las lamentables explicaciones que aparecían en el insólito comunicado que hizo llegar a la opinión pública, desvelando hechos económicos presuntamente delictivos de su padre".
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Alfonsín, abogado del Estado gallego, mano derecha de Felipe desde que era príncipe y la mano que mueve la cuna. Y también mueve la silla del rey emérito para salvar el trono del rey Felipe. Peñafiel dispara contra todos. Ni una mala palabra para Juan Carlos y carga las tintas contra la no tan inocente Sofía.