La diputada de la CUP en el Parlament Anna Gabriel ha explicado que su partido contempla que el Estado le aplique la Ley de Partidos para intentar ilegalizarlo como medida para obstaculizar el proceso soberanista catalán: "Tenemos que ser conscientes de cómo actúa el Estado".

"No descartamos que otro de los embates judiciales pueda venir de la mano de la aplicación de la Ley de Partidos", expone en una entrevista de Europa Press, una ley que desde su creación se ha aplicado contra formaciones de la izquierda abertzale.

Gabriel argumenta que la ley se creó expresamente contra Batasuna, pero que ahora se podría 'reciclar' para la CUP: "Han decidido no aplicarla nunca contra formaciones políticas de extrema derecha, pero no sería descartable que pudiera ser aplicada a la izquierda independentista".

Régimen jurídico catalán

Gabriel proyecta que la ley se activaría cuando JxSí y la CUP hagan pública y registren la tercera 'ley de desconexión' sobre una régimen jurídico catalán, que los soberanistas ven clave para convocar el referéndum y luego declarar la independencia.

La diputada contempla que el Estado alegaría que la CUP tiene militantes investigados por la misma Audiencia Nacional por sedición -Joan Coma- o por delitos contra la Corona -quema de fotos del Rey- para poner en marcha toda la maquinaria para su ilegalización. "No lo digo desde una perspectiva alarmista, ni desde ninguna posición victimista. No lo digo en absoluto porque tenga que condicionar nada. Nuestra obligación es tener en cuenta los diferentes escenarios", razona.

Así, Gabriel admite que no tienen "ninguna conexión ni con la alta magistratura ni el alto funcionariado" para tener algún indicio de que esta opción existe, pero sentencia: "Hemos aprendido a militar -en la izquierda independentista- previendo todas las consecuencias".

Actuarán igual

Consideran que la aplicación de esta ley contra Batasuna no tuvo ningún efecto positivo para el conflicto vasco, y avisa de que, si llega a aplicarse, tampoco podrá incidir en la realidad política catalana y en el rumbo soberanista.

"Para nosotros no variaría en nada. O para decirlo de otra forma, variaría en que actuaremos con más determinación con la voluntad de romper con este Estado español. No tendrá ningún efecto", advierte la diputada anticapitalista.

Gabriel cree que algunos partidos recordarán muy bien que la Ley de Partidos sigue vigente en España "porque votaron favorablemente", y entre las formaciones que dieron su aval en el Congreso en 2002 figuraba CiU, entonces alejada del soberanismo.

Negociación

La diputada de la CUP dice que Catalunya tendrá "seguro" unos presupuestos en 2017, pero no precisa si serán unos prorrogados o unos nuevos gracias a los votos que la CUP pueda dar a la propuesta que ha presentado el Govern.

Avisa de que su partido no se ha creído el lema del Govern de que son las cuentas más sociales de la historia: "Si quien lo dice lo dice convencido, tenemos un problema o no hablamos el mismo idioma. Hemos visto que no son los más sociales, sino que lo pueden ser mucho más".

Gabriel reclama que se contemplen las enmiendas de la CUP en las que propone reubicar 760 millones de las cuentas, sacando las partidas de algunos ámbitos -como externalizaciones- para dedicarlos a otros con más acento social.

Cambios en los impuestos

Lamenta que el Govern no haya aceptado la propuesta de la CUP de cambiar impuestos como el IRPF, pero recuerda que la política tributaria no solo depende de los presupuestos, sino que en "cualquier momento se puede llevar a trámite" una ley que modifique la legislación fiscal.

"Muy a menudo son JxSí y el PP quienes vetan determinados debates que no están dispuestos a abrir", ha zanjado Gabriel, que considera que la propuestas de la CUP satisfarían al 96 por ciento de la población, mientras que muchas de las del Govern son para el otro 4 por ciento.