En España se cometen un millón de robos y hurtos al año, y solo un 10% corresponden a un plan organizado, según datos del Ministerio del Interior. Por lo tanto, un 90% de las sustracciones se llevan a cabo de forma impulsiva y sin previa planificación. Los supermercados, farmacias y grandes superficies llevan años implantando sistemas de seguridad para acabar con los robos, pero muchas veces las cámaras no se miran y las alarmas se quitan con facilidad.
Para detectar a ladrones potenciales y acabar con los robos nace Veesion, una start-up que añade a los sistemas de vigilancia tradicionales una capa de inteligencia artificial que permite captar, registrar y notificar las actividades sospechosas de los clientes de un establecimiento. “El gasto en seguridad es gigante, las cámaras no son rentables porque debes tener a una persona que esté mirándolas todo el rato y las alarmas son útiles, pero aun así poco eficientes”, comenta Pablo Blanco, country manager de la compañía en una entrevista para ON ECONOMIA.
Inteligencia Artificial para detectar robos
¿Cómo funciona? La empresa desarrolla un sistema de Inteligencia Artificial de detección de robos mediante los gestos. Cuando se detecta algún movimiento que pueda indicar un robo o hurto, el programa de Veesion envía una notificación para que los responsables vean el robo en directo. "Este sistema se acopla a las cámaras, así que el gasto es mínimo.
Para sacarles partido a las cámaras que tienen los establecimientos, mandamos una notificación cuando hay riesgo de sustracción", argumenta Blanco. En este sentido, el directivo apunta que la plataforma detecta si un usuario camina de manera normal o si está vigilando para no ser pillado o se fija en movimientos sospechosos. "Tenemos un algoritmo que analiza, en tiempo real, la actividad de los clientes y pone en alerta, de manera automática, todas las actividades sospechosas", recuerda.
Cuatro tipos de hurtos
Blanco señala que hay cuatro tipos de robo: los clásicos con bolsillo (meterse el producto en los pantalones, abrigo o chaqueta), el consumo en tienda (abrir una lata, paquete o bolsa dentro del local), el robo con carrito de bebé (esconder dentro los artículos que van a sustraer) y la mochila o bandolera (meter los artículos dentro). "Es curioso, pero este enero hemos notado un pico de robos, la cuesta de enero se está notando", confiesa en este medio.
Veesion en España
El negocio nació en Francia y aterrizó en España hace aproximadamente un año. Desde entonces, más de 600 tiendas del país ya usan su tecnología. Carrefour, Eroski y DIA, entre otros supermercados, son algunos de sus clientes, aunque también cuentan en su cartera con más de 200 farmacias. "La gente no roba cosas baratas, sino que van directamente a cosmética, perfumería, botellas de alcohol y embutidos, más allá de las latas de marisco", explica Blanco. Además, añade que los supermercados pierden el 1,5% de sus productos debido a hurtos y sustracciones y el 80% de los ladrones que salen impunes "acabarán reincidiendo".
“El robo en tiendas es una plaga para todas las empresas. Hace unos años se llegaron a registrar más de 100.000 millones de dólares (unos 91.700 millones de euros) de pérdidas por hurtos y sustracciones. Mientras tanto, los comercios invierten aproximadamente la misma cantidad en asegurar sus recintos”, asegura un estudio de la compañía francesa en el que también se remarca que solo un 5% de los robos son resueltos en la actualidad.
2.000 establecimientos en Europa
Veesion está presente más de 2.000 establecimientos distribuidos entre Francia, Reino Unido, Portugal, Italia o Alemania y, tras implantar la tecnología, hay comercios que detectan entre 10 y 15 hurtos por semana. Entre los objetivos para este 2023, desde la start-up quieren abrir una sede física en Madrid y seguir incrementando el número de tiendas. "En prácticamente todas las grandes cadenas contamos con una prueba piloto, ojalá este año apuesten por nosotros y acaben adquiriendo nuestro sistema de Inteligencia Artificial", defiende. Tras asentarse en España, desde la firma quieren saltar el charco y abrir en países de Norte América y Latinoamérica.
La empresa cuenta con 130 trabajadores repartidos por los países en los que está presente. En España suma más de 20 empleados y el año pasado lo cerró con apenas 34 trabajadores a nivel mundial. La compañía terminó el 2021 con más de un millón de euros de facturación y en apenas cinco años de vida ha logrado captar 11 millones de dólares de inversión (unos 10,1 millones de euros). En su última ronda de inversión, llevada a cabo en marzo del año pasado, participaron Founders Future, Verve Ventures y Aglaé Ventures, entre otras firmas.