"Si mi mejor amigo me pregunta qué coche se tiene que comprar, le diré que si quiero conservar su amistad dentro de seis meses, mejor no responder nada de buenas en primeras". Esta ha sido toda una declaración de intenciones del presidente de Fecavem, Jaume Roura, que conjuntamente con el director general de Anfac, José López-Tafall, han presentado la jornada matinal de este viernes "El momento de la descarbonización y la electrificación" desde el Automobile Barcelona.

El ritmo que marca la UE

El salón internacional se abrirá al gran público a partir de este fin de semana, pero la jornada de hoy ha servido para debatir entre diferentes actores sociales y políticos sobre el modelo de automoción que Catalunya y el conjunto de España tienen que liderar con la fecha del 2035 marcada en el calendario, cuándo la Unión Europea prevé prohibir la venta de coches de combustión.

La incertidumbre que genera actualmente la transición de los motores térmicos a los más sostenibles, como el híbrido, el eléctrico o el hidrógeno, está comportando un dolor de cabeza al comprador final. Y, volviendo al inicio, desde el mundo de la distribución, representada por Fecavem, y la fabricación, con Anfac, han pedido más ayudas públicas y un acuerdo de todos los actores de la cadena de valor para romper con la incertidumbre actual.

Por la el lado del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, han lanzado un mensaje de calma y ven el vaso medio lleno: "Si hay incertidumbre también es bueno porque significa que el comprador tiene más opciones que nunca de escoger qué quiere. Y no os preocupéis de que todo el mundo podrá comprar la tipología de motor que quiera", ha subrayado Jaime Moreno, director general de Transporte Terrestre del Ministerio. Un mensaje, en positivo, que no todo el mundo ve por igual.

¿Qué dicen los sindicatos?

Desde Fecavem, consideran que la fecha del 2035 hace falta alargarla hasta el 2050 y desde los sindicatos también advierten que hay que asegurar la sostenibilidad ecológica, pero también laboral de todos los trabajadores de la cadena. Rafael Guerrero, responsable de movilidad de la Federación de Industria de CCOO: "Desde el Brasil, compañeros de los sindicatos de este país nos dicen que en Europa lo estamos haciendo muy bien, podemos ser pioneros, pero sin quedarnos atrás". Hay que tener en cuenta que, actualmente, la automoción de los Estados Unidos y el auge de China está situándose al frente y deja Europa en posiciones inferiores.

El problema de los cargadores eléctricos

El otro gran aspecto es la de los puntos de recarga. La empresa privada de Wallbox, ha subrayado que es perfectamente posible instalar estos espacios en los hogares, pero hace falta una fiscalidad más laxa y rápida para conceder permisos. "Durante el 2022, la infraestructura de recarga de acceso público ha alcanzado los 18.128 puntos de recarga, cosa que en comparación con el año anterior supone 4.717 nuevos puntos de recarga", ha subrayado Iván Tallón, a Country Manager de Wallbox. El aumento registrado el último año es insuficiente para alcanzar el objetivo marcado para el 2022 de 45.000 puntos de recarga de acceso público, necesarios para dar cobertura al objetivo del PNIEC. Igualmente, al ritmo actual será difícil alcanzar los objetivos indicados en el Plan de Recuperación Transformación y Resiliencia marcados por el Gobierno, que fijan para el 2023 entre 80.000 y 100.000 puntos de recarga de acceso público y 250.000 vehículos electrificados.

La pregunta tiene tantas respuestas como condicionantes hay, pero las fechas y la pauta de que marca Europa permite una transición de poco más de una década que permitirá seguir conviviendo todas las combustiones actuales que conocemos. Desde el Automobile Barcelona se ha puesto a la disposición en el Pabellón 8, en el stand de Fecavem, una pantalla táctil que permite responder, a través de cuatro sencillas preguntas, a esta cuestión.