La dirección de Marie Claire y los sindicatos han iniciado formalmente este lunes la negociación del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que el fabricante de pantis y lencería íntima ha puesto en marcha para tratar de evitar un cierre definitivo. Según la documentación entregada a los sindicatos, que volverán a reunirse con la dirección el próximo día 9 y no descartan movilizaciones, los despidos afectaría a 198 de los 288 trabajadores que aún emplea la empresa, que en momento llegó a dar trabajo a más de un millar de personas. Los 90 empleados que se mantendrían pertenecen al área de producción, lo que indica que el proceso de reestructuración operativa y financiera que los dueños de Marie Claire acaban de poner en marcha para salvar la empresa pasa por reducir la plantilla al mínimo imprescindible para que resulte compatible continuar produciendo en España.

Ese plan de supervivencia pasa inevitablemente por la entrada de un socio privado dispuesto a recapitalizar la empresa, ahogada por las deudas a pesar de haber recibido en dos años 21 millones de euros por parte de la Generalitat Valenciana a través del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF). Los actuales dueños de Marie Claire, el grupo textil valenciano B2Tex, no han podido llevar a cabo el plan de viabilidad negociado con la administración valenciana para recibir esos préstamos, por lo que ahora trata de renegociar los plazos.

El IVF, prácticamente el único acreedor de Marie Claire junto al Fogasa, está dispuesto a dar oxígeno a la empresa, ya que su cierre definitivo supondría un duro golpe para Els Ports y l'Alt Maestrat, las dos comarcas del interior de Castelló de las que proceden gran parte de sus trabajadores y que durante años han tenido en la empresa textil como el principal motor económico de la zona. Además, redimensionar la compañía para mantener la mínima actividad rentable y compatible con el mantenimiento de la producción en España es la única vía poder de recuperar los 21 millones de euros más los intereses de los créditos comprometidos.

Marie Claire se comprometió con la Generalitat Valenciana a destinar los fondos a cubrir en parte las pérdidas que arrastraba por la caída de las ventas y la pandemia hasta el final del préstamo y a asegurar y promover el mantenimiento del empleo en la zona. Por ese motivo, el ERE que la empresa ha puesto en marcha debe contar con el visto bueno previo del IVF, así como cualquier movimiento para externalizar parte o totalmente su actividad fuera de la comarca. Según explican fuentes conocedoras de la negociación, el organismo público no quiere ser un obstáculo para un posible acuerdo de reducción de plantilla y hará lo que esté en sus manos para facilitar el mantenimiento de la actividad.

Valor añadido y rentabilizar intangibles

Con todo, el IVF sí ha puesto unas condiciones que pasan por la entrada de capital privado en la empresa, porque la Generalitat no tiene intención de ir más allá de los 21,5 millones que ya ha inyectado ni de aplicar una quita en el caso de que la empresa entre en concurso de acreedores. La recapitalización, según estas mismas fuentes, podría venir por parte de los actuales propietarios.

Además, los socios de ThinkTextil al frente de la empresa tendrán que presentar un nuevo plan de viabilidad adaptado a las nuevas circunstancias que se basaría en tres ejes: la mencionada aportación de capital privado en la empresa para respaldar el proyecto de relanzamiento de la marca; una reorientación operativa para centrarse en productos de mayor valor añadido, como por ejemplo podrían ser las medias funcionales, compatibles con una plantilla menor y una mayor rentabilidad en el mercado nacional; y una estrategia para rentabilizar Marie Claire como marca, ya que esta intangible es uno de los mayores activos con los que cuenta la firma a día de hoy.

De hecho, los propietarios de Marie Claire destacan que la búsqueda de inversores demuestra su "compromiso" por asegurar el futuro de la empresa y mantener su posición como líder en el mercado de la lencería íntima no solo en el mercado nacional, sino expandiendo la marca a nivel internacional. En este sentido, cabe recordar que alcanzó un acuerdo con la editorial Marie Claire, quien ostenta los derechos de marca a nivel global, para poder comercializar sus productos bajo su propia marca también fuera de España.

Tras la reunión negociadora del ERE de este lunes, CC. OO. y UGT han manifestado a través de un comunicado conjunto el esfuerzo de los trabajadores, que han puesto "su trabajo y su salario al servicio de Marie Claire junto con las administraciones públicas", y han solicitado más documentos justificativos. El ERE afectaría a la mayor parte de la plantilla de 288 trabajadores (130 ya en un ERTE, 90 de producción y 68 en otras áreas) a excepción de los 90 empleados de producción (de entre 40 y 55 años) y personal técnico-administrativo, entre 100 y 120 personas, según han detallado a EFE fuentes de CC. OO.

Los sindicatos ven difícil la viabilidad de la empresa con un volumen de 90 trabajadores en producción y ahora analizarán los documentos facilitados por la dirección para saber con exactitud el impacto de la deuda y el estado de las cuentas de tesorería. Los despidos suponen un duro golpe económico y social por ser la única industria de la zona y el Ayuntamiento de Vilafranca aprobó el pasado jueves una declaración institucional por los tres grupos municipales que conforman el consistorio en la que se exige a todas las partes implicadas que hagan lo posible por reconducir la "difícil situación" que atraviesa la empresa y garanticen que mantendrá su actividad en este municipio, así como un plan de reconversión industrial en esta comarca.