El Sabadell se alinea con sus competidores y reordena su banca de empresas creando dos categorías intermedias en las que agrupará a las compañías que facturan entre 900.000 y 2 millones de euros, y entre 2 y 10 millones de euros. De esta manera, unos 380 directores de pymes pasarán a denominarse directores de empresa. Asimismo, el banco que dirige César González-Bueno realizará algunos cambios en su banca de particulares, donde prevé que hasta 156 gestores hipotecarios que actualmente prestan servicio en oficina pasen a hacerlo en remoto.

El banco prevé implementar ambos cambios en 2024, según comunicó este lunes a los sindicatos en una reunión donde el Sabadell aclaraba que, en cualquier caso, se trata una reestructuración interna que no afectará a los clientes. El movimiento en banca de empresas es similar al realizado en octubre de 2022 en banca privada, cuando la entidad segmentó a sus clientes de altos patrimonios en tres categorías, clientes con más de 100.000 euros, desde 500.000 euros o de un millón de euros.

Hasta la fecha, las sucursales especializadas del Sabadell atienden o a grandes empresas con ingresos superiores a los 10 millones de euros, o a pymes que facturan entre 900.000 y 10 millones de euros. Mientras que los profesionales, autónomos, comercios y pequeñas empresas con facturación igual o inferior a 900.000 euros son atendidas en cualquier oficina por los denominados directores de negocios.

Los directores de negocio son los que se encargan de la gestión de empresas con ingresos de hasta 900.000 euros, una categoría que seguirá existiendo. Los que abarcaban compañías que facturan entre 900.000 euros y 10 millones se llaman directores de pymes, pero ahora serán directores de empresas que gestionarán compañías que facturan entre 900.000 euros y 2 millones, de 2 millones a 10 millones, o de más de 10 millones de euros. Todos pasan a ser directores de empresas, pero a cada uno se le asignará un colectivo.

En total, serán 380 personas afectadas que actualmente trabajan en jornada completa de 8 a 3 y tienen que decidir si quieren pasar al horario especial, de empresa, que es de 8 a 5 en jornada partida. Como se produce una modificación sustancial de las condiciones de trabajo, "tiene que ser una adhesión voluntaria", explican fuentes sindicales, quienes indican que, de momento, no habrá reubicación física para ellos.

Mediante esta nueva estructura, el Sabadell quiere impulsar el negocio de banca de empresas y alinearse a lo que ya han hecho otros bancos del país, añaden estas fuentes, pero también convertirse en el banco principal de las empresas, concretamente de aquellos que trabajan con varios bancos. Los cambios se implementarán el 1 de enero, de manera que ahora empieza el periodo de adhesión de los trabajadores, hasta que en noviembre quede conformado el equipo, para después segmentar a los clientes y carterizarlos bajo el nuevo modelo, añaden.

Los gestores hipotecarios trabajarán fuera de oficina

En paralelo, el Sabadell también realizará algunos cambios en su banca de particulares, en concreto en el negocio hipotecario. El consejero delegado, César González-Bueno, ya anunció el año pasado que los gestores hipotecarios (que son los que acompañan al cliente durante el proceso de contratación de la hipoteca) habían conseguido disminuir considerablemente el tiempo de contratación de la hipoteca. De media lleva tres meses, pero si el gestor detecta que hay un interesado puede gestionar la hipoteca en 24 horas. 

Actualmente, el banco catalán cuenta con unos 240 empleados encargados de la gestión de hipotecas en oficinas, pero el Sabadell ha planteado que unos 156 realicen ahora esta misma función en remoto y salgan de las sucursales. Su intención es que trabajen desde el domicilio o desde centros especializados.

La entidad, sin embargo, no ha comunicado a los sindicatos cuáles serán las nuevas funciones de los 84 que se quedarán en la red de oficinas. “No se sabe si cambiarán sus funciones”, comentan estas fuentes. A los 156 afectados ya les ha presentado un abanico de tres horarios distintos y tienen, al igual que los gestores de empresas, hasta el próximo mes de noviembre para comunicar su adhesión.