El PSC ha solicitado por escrito la comparecencia del nuevo director de Fira 2000, David Poudevida, en el Parlament para que exponga las líneas de actuación que llevará a cabo al frente del ente ferial y profundice en la información sobre los proyectos que tiene sobre la mesa esta sociedad, que es la encargada del nuevo planeamiento y concurso público para la ampliación de los espacios de Fira de Barcelona en l'Hospitalet de Llobregat.

Los socialistas evidencian que la elección de Poudevida no ha contado con el consenso de todas las administraciones e instituciones que forman parte del consejo de administración de Fira 2000 y, en consecuencia, también han solicitado al Govern -en una pregunta por escrito- que concrete por qué motivos se nombró el nuevo director. En concreto, pide explicaciones sobre el perfil profesional y la experiencia del candidato para asumir responsabilidades en una compañía que se dedica única y exclusivamente al ámbito ferial y de la cual depende el futuro de Fira de Barcelona.

También insisten en el hecho de que hace falta argumentar porque se procedió al relevo en la dirección general cuando no había motivos fehacientes para desestimar la tarea que estaba realizando el anterior directivo, Joaquim Ferrer, que asumió el cargo a mediados de 2022, con el visto y complace de todas las administraciones. A este respecto, la portavoz y secretaria de Comunicación del PSC, Èlia Tortolero, ha insistido este lunes en rueda de prensa en las dudas que genera el hecho de que "se ha cambiado la dirección de Fira 2000 sin el consenso de instituciones que forman parte de la Fira" y que, por tanto, "hemos registrado las preguntas en el Parlament porque queremos saber cuál ha sido el motivo del cese del anterior director general".

La pregunta que la portavoz del grupo parlamentario PSC-Units, Alicia Romero, ha hecho llegar al Parlamento, va más allá y reclama al Ejecutivo catalán que reflexione públicamente sobre la decisión unilateral que ha tomado ejerciendo la mayoría que ostenta en el capital de Feria 2000 y que provocó el voto en contra del Ayuntamiento de Barcelona, el Ayuntamiento de l'Hospitalet de Llobregat, la Diputación de Barcelona, el Àrea Metropolitana de Barcelona y la Cambra de Comerç de Barcelona.

El PSC ya adelantó que "vigilaría" cómo desarrollaría David Poudevida su gestión como director general de Fira 2000, tanto buen punto se conoció que su designación había generado un gran malestar institucional ante la falta de diálogo y consenso con que se concretó.

La iniciativa parlamentaria de los grupo socialista se suma y va en la misma línea que la que emprendió Junts per Catalunya el pasado viernes, con la presentación de otra pregunta por escrito al Parlament, donde también pedía explicaciones al Govern. El anterior director general había sido escogido a propuesta del entonces conseller de Economia, Jaume Giró, y contó con el apoyo de todas las partes.