Moeve cerró el primer semestre con un beneficio neto ajustado de 324 millones de euros, un 19% menos a causa del descenso de los márgenes de refino, el apagón del 28 de abril en España y Portugal y el mantenimiento de algunas plantas, que estaba programado para el segundo trimestre. La energética española subrayó en un comunicado los resultados “resilientes en todas sus actividades” pese a la coyuntura adversa.
La compañía que dirige Maarten Wetselaar obtuvo un ebitda ajustado de 733 millones, inferior a los 1.099 millones del primer semestre del año pasado. El flujo de caja de operaciones descendió moderadamente, hasta los 652 millones, cosa que “subraya la gran capacidad de conversión de caja de la compañía”, que invirtió 502 millones de euros entre enero y junio, de los cuales más de la mitad, el 52%, se destinó a descarbonización y transición energética.
La división de energía, la que tiene más peso en Moeve, cerró el periodo con un ebitda ajustado de 564 millones, con un descenso significativo por la caída del precio del barril de Brent y una menor tasa de utilización como consecuencia del apagón.
La división de química también sufrió un descenso, hasta los 108 millones, por la caída de la demanda en Europa, si bien logró cierta recuperación en el segundo trimestre. El negocio de exploración y producción obtuvo un ebitda ajustado de 138 millones, algo inferior al de los primeros seis meses de 2024 por la caída de los precios del petróleo y a “la normalización de los niveles de producción de restantes activos de exploración y producción”.
“En un periodo marcado por la volatilidad del panorama energético mundial, Moeve ha registrado unos resultados sólidos en términos de flujo de caja, lo que pone de manifiesto la resiliencia de nuestra cartera diversificada y nuestra ejecución disciplinada”, destacó Wetselaar.
Hidrógeno verde y transición energética
Una de las grandes apuestas de la energética de cara a futuro es el hidrógeno verde. En la primera mitad de 2025, Moeve logró 304 millones de euros de financiación de la Unión Europea para llevar a cabo la primera fase del Valle Andaluz del Hidrógeno.
“Seguimos avanzando en nuestra estrategia Positive Motion para ser un proveedor líder de moléculas verdes y soluciones de movilidad sostenible en esta década, con la mitad de nuestra inversión dirigida a proyectos sostenibles como el desarrollo de nuestro Valle Andaluz del Hidrógeno Verde y la construcción de nuestra planta de biocombustibles de segunda generación”, subrayó el CEO de la compañía.
Moeve también ha optado por la rotación de activos. Vendió, en el primer semestre, su participación del 25% en el Bloque 53, frente a las costas de Surinam, que es “un claro ejemplo de nuestro enfoque centrado en la asignación de capital, reorientando los recursos para alinearlos con nuestra visión estratégica de liderar la transición energética en Europa”, dijo Wetselaar.