Bankinter reconoce que se ha quedado atrás en la guerra hipotecaria desatada en España y Portugal desde que arrancó 2024. Las entidades han empezado a abaratar los préstamos para comprar una casa en previsión de que el Banco Central Europeo comience a bajar los tipos de interés este verano. Algunos bancos, como Sabadell o ING hasta cuatro veces.

Pero el banco que dirige Gloria Ortiz no ha sido tan agresivo con su oferta hipotecaria porque cree que el BCE “no va a bajar tanto los tipos, ni tan rápido” como prevén sus rivales. Así, las cuentas de Bankinter muestran que entre enero y marzo ha concedido hipotecas por valor de 1.300 millones, son 200 millones menos que el cuarto trimestre de 2023, o un 13% menos.

La caída es aún mayor si se compara con el mismo periodo de 2023, en concreto, de 300 millones, lo que supone un 20% menos. En la presentación de resultados celebrada este jueves en Madrid, la consejera delegada explicó que esta caída del 20% (a nivel grupo) recoge la menor producción en España y Portugal, pero también en Evo Banco, su marca digital, que ha concedido "la mitad de hipotecas que el año pasado", o lo que es lo mismo, un 50% menos.

Por el contrario, su negocio de hipotecas en Irlanda ha crecido un 53%; Bankinter se enfrenta, por tanto, a su segundo año consecutivo de caídas porque en el conjunto de 2023 ya vendió un 11% menos de hipotecas que en 2022 dado el contexto de inflación y elevados tipos de interés, que ha frenado la venta de viviendas y de préstamos.

Tercer año de caídas en España

En España, el negocio hipotecario de Bankinter cae desde hace más tiempo. A diferencia de sus competidores, Bankinter no cerró un buen 2022. De hecho, el banco vendió ese año un 18% menos de hipotecas que en 2021, cuando alcanzó la cifra récord de 4.176 millones de euros. Tampoco le fue bien en 2023, cuando su producción hipotecaria fue un 15% más baja que el año anterior. En concreto, el banco vendió nuevas hipotecas por valor de 3.700 millones incluyendo Evo Banco. Sin Evo la cifra cayó aún más, hasta los 2.800 millones (un 30%).

Y en los tres primeros meses de este 2024 ha vuelto a sufrir una caída del 9% respecto al mismo periodo del año pasado. “Pese a ello”, defendía la CEO, “mantenemos cuotas”. En concreto, la cuota de mercado de Bankinter en nueva producción es del 6,6%, en línea con la del año pasado, pero ya lejos del 8,4% que alcanzaron en 2022. En Portugal, su cuota es del 8,8% y en Irlanda del 7,5%.

El banco explica que además de la fuerte competencia, hay otros elementos que han contribuido a esta caída del primer trimestre del año. Por una parte, está la debilidad actual del mercado inmobiliario, ya que los precios siguen caros y se están vendiendo menos casas.

Por otra, el factor estacional. Las vacaciones de Semana Santa, a diferencia del año anterior, fueron en marzo y esto retrasa las operaciones. Y en el caso concreto de Bankinter Portugal, además, influye que el primer trimestre de 2023 fue “excelente” gracias a una potente campaña comercial que no han activado este ejercicio.

Bankinter sitúa la reactivación en el segundo semestre

Preguntada por si al banco le preocupa estar quedando atrás en el negocio más competitivo de España, la CEO señalaba que las hipotecas “desgraciadamente, son ahora un commoditie”. Y los clientes se mueven por precio. ”No me preocupa”, aseguraba. Tras la debacle del año pasado (se vendieron un 18% menos de hipotecas en España) las entidades han empezado a tirar precios desde que arrancó 2024. De hecho, según los datos de comparadores y bróker hipotecarios como Kelisto, HelpyMyCash o iAhorro, casi una veintena de hipotecas están más baratas ahora que cuando arrancó el año.

Pese a ello, Bankinter sitúa "la reactivación del mercado hipotecario" en la segunda parte del año, cuando llegue "una posible bajada del euríbor y un entorno macroeconómico mejor al previsto". El escenario con el que trabaja contempla “como mucho” una o dos bajadas de tipos de interés este año, lo que podría impulsar la compra de viviendas.

“Somos optimistas con las hipotecas, creemos que la demanda se va a reactivar. Además, el nivel de pagos anticipados ha bajado y esperamos una nueva producción hipotecaria similar a la del año anterior y menos amortizaciones, con lo cual, habrá crecimiento en el saldo hipotecario”.

El año pasado Bankinter registró la salida de 1.800 millones de su balance por las amortizaciones anticipadas, en línea con el resto sector. Pero ya este 2024 las amortizaciones son menores, revelaba Ortiz, y la expectativa es que los recursos de balance crezcan, como ya han hecho en el primer trimestre (un 20%).