El fabricante de hemoderivados Grifols, tal como anunció al presentar los resultados económicos del primer semestre de 2025, abonará el próximo miércoles, 13 de agosto, un total de 102 millones de euros en concepto de dividendo. Se trata del primero que pagará la compañía tras interrumpir durante cuatro años este tipo de retribución a sus accionistas.

La firma de la familia Grífols argumentó la vuelta a los dividendos como una muestra de su "firme compromiso" con la creación de valor para el accionariado, después de unos tumultuosos años en los cuales las finanzas del grupo y su cotización bursátil se han visto directamente impactadas por el desempeño de los negocios. En este sentido, la compañía explicó que el actual pago de este primer dividendo es consecuencia de la "sólida" evolución de los resultados subyacentes y la continua generación de flujo de caja libre.

En concreto, el consejo de administración de la firma catalana acordó abonar una retribución de 0,1215 euros netos por acción, tanto para los títulos de clase 'A', con derecho a voto e intercambiadas en el Ibex-35, como para los de tipo 'B', que cotizan en el Mercado Continuo.

Grifols realizó su último pago de dividendo el 7 de junio de 2021, por un importe neto de 0,2951 euros por acción de clase 'A' y 0,3034 euros por título de clase 'B', correspondiente al ejercicio 2020. Dicho reparto marcó el inicio de una pausa de cuatro años en la retribución al accionista, interrumpida recientemente con el anuncio del nuevo dividendo previsto para este 13 de agosto, en línea con la política de recuperación del pago regular tras el impacto de la pandemia.

Un beneficio de 177 millones

Grifols registró un beneficio neto de 177 millones de euros durante el primer semestre de este año, casi cinco veces superior (+387,6%) al logrado en el mismo periodo del ejercicio precedente, cuando ganó 36 millones de euros.

En este contexto, el director financiero de Grifols, Rahul Srinivasan, explicó en la presentación de resultados de la compañía, a finales de junio, que la empresa tiene como objetivo pagar un segundo dividendo a cuenta del ejercicio 2025 en el segundo trimestre de 2026, lo que le llevaría a recuperar el ritmo de reparto de dividendos que tenía antes de frenarlos en 2021.

Reordenación accionarial

La familia Grífols Roura ha decidido fusionar sus family offices Deria y Ralledor Holding en Deria, que consolidará su posición como primer accionista de Grifols con una participación del 15,35%, en una operación que busca optimizar la gestión del patrimonio familiar, simplificar su estructura societaria y establecer un modelo de sucesión ordenado y equitativo de cara a las futuras generaciones.

En concreto, Deria se reforzará como el primer accionista de la compañía de hemoderivados, con una participación exacta del 15,349% en acciones tipo 'A' y un 10,8% en títulos tipo 'B', una vez finalizado el proceso de fusión, si bien aún no aparece en los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Previo a la fusión, Deria controlaba el 9,195% del capital social de la compañía catalana y Ralledor Holding, el 6,154%.

Colaterales de la crisis financiera

Desde 2021, la situación financiera y de gobernanza de Grifols ha pasado por situaciones críticas. Muestra de ello ha sido la reciente sanción que ha emitido la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) contra la compañía, por importe de 1,4 millones de euros. La CNMV había abierto un expediente sancionador al entender que Grifols omitía aspectos relevantes de conformidad con las normas de contabilidad, en sus informes anuales de 2021, 2022 y 2023, así como en las cuentas del primer semestre de ese último año. El regulador detectó, igualmente, información engañosa sobre el método de cálculo de algunas medidas alternativas del rendimiento y explicaciones incompletas y falta de inclusión de operaciones vinculadas.