Cellnex pierde 193 millones de euros en el primer semestre del año, un 13,5% más que en el mismo periodo del año anterior, cuando registró un resultado negativo de 170 millones. La torrera catalana achaca este incremento de las pérdidas al aumento de las amortizaciones (+16%) y de los costes financieros (+13%), ambos asociados al proceso de consolidación e integración en el grupo de los activos adquiridos. Compras que han formado parte de la estrategia expansiva de la compañía en los últimos años y que ahora centra sus esfuerzos en crecer de manera orgánica.
En cuanto a los ingresos, estos crecieron un 17% en comparación con el primer semestre de 2022 y un 18,4% si se incluyen los ingresos provenientes de la refacturación de la energía a clientes (pass-throughs), según ha explicado la compañía este jueves en un comunicado. De este modo, Los ingresos alcanzaron los 2.001 millones de euros (1.795 millones de euros si se excluyen los pass-throughs), frente a los 1.690 millones (1.538 millones excluyendo pass-throughs) del primer trimestre del año anterior.
Por negocios, los ingresos de la empresa proceden en un 91,1% de los servicios de infraestructuras para operadores de telecomunicaciones móviles (+19,3 %), en un 5,8 % de la actividad de infraestructuras de radiodifusión y en un 3,1% de las actividades centrados en redes de seguridad y emergencia, así como en 'ciudades inteligentes'.
El ebitda ajustado de Cellnex creció un 16%, hasta los 1.490 millones, "recogiendo, junto con el crecimiento orgánico, la consolidación del perímetro". En este sentido, el crecimiento orgánico de la compañía, uno de los pilares básicos en su nueva etapa, registró un sólido crecimiento del 7,1% de los puntos de presencia (PoPs) en los emplazamientos del grupo. De este crecimiento, un 4,1% se debe a las nuevas colocaciones en emplazamientos existentes, que suman 2.741, y un 3% proviene del despliegue de 2.220 nuevos emplazamientos.
Objetivo de flujo de caja libre positivo para final de año
Por su parte, el flujo de caja libre y recurrente apalancado alcanzó los 741 millones (+16%), y el flujo de caja libre fue de -130 millones, frente a los -739 millones del mismo período del año anterior, lo que representa una mejora del 82%. La compañía reitera el compromiso de alcanzar un flujo de caja libre positivo (break even al cierre de 2023) y la obtención de la calificación de grado de inversión por parte de S&P el año que viene.
Marco Patuano, consejero delegado de Cellnex, ha comentado que “seguimos viendo el dinamismo del negocio con un fuerte crecimiento de los principales indicadores industriales y financieros en la primera mitad del año. Estamos avanzando a buen ritmo hacia los objetivos que nos fijamos el pasado mes de noviembre en el “nuevo capítulo” del Grupo, centrados en el crecimiento orgánico, la generación de flujo de caja libre positivo para 2024 y alcanzar el grado de inversión no más tarde de 2024.”
Junto con el crecimiento oránico y la calificación del grado de inversión, la reducción de deuda es otro de los objetivos que se ha marcado la compañía en su nueva etapa que liderará Marco Patuano, tras la salida de Tobías Martínez. En este sentido, la deuda financiera neta del grupo a junio de 2023 se elevó hasta los 17.900 millones de euros, de la cual el 76% está referenciada a tipo fijo.
Ingresos entre 4.100 y 4.300 millones para 2025
Cellnex también destaca haberse reforzado en los principales mercados donde opera en los primeros seis meses del año. Así, la empresa catalana ha ampliado acuerdos industriales en Francia (con SFR y Bouygues Telecom) y Polonia, donde ha adquirido recientemente el 100% del capital de la compañía OnTower Poland por un total de 510 millones de euros.
Asimismo, Cellnex acaba de cerrar un préstamo de 315 millones de euros con el Banco Europeo de Inversiones para financiar el despliegue de infraestructura 5G en España, Portugal, Francia, Italia y Polonia. La compañía cuenta con una liquidez disponible (tesorería y deuda no dispuesta) de aproximadamente 3.700 millones.
A 30 de junio, Cellnex contaba con 112.737 emplazamientos operativos en doce países europeos, a los que se sumarán otros 16.060 que se desplegarán hasta 2030. A ello se añaden 8.541 microceldas (Small Cells) y sistemas de antenas distribuidas (DAS).
La compañía de infraestructuras de telecomunicaciones reitera la perspectiva anunciada para 2025, con unos ingresos que se sitúen entre los 4.100 y los 4.300 millones de euros, un ebitda entre los 3.300-3.500 millones y un flujo de caja libre y recurrente entre los 2.000 - 2.200 millones. “Todos nuestros pilares estratégicos –foco en el crecimiento orgánico, disciplina en las inversiones y eficiencias– se confirman” ha asegurado Patuano.