BBVA y Santander baten récord con las tarjetas de crédito, sobre todo en los países emergentes, pero también en España. El banco que preside Carlos Torres ha disparado un 80% su contratación en Turquía y más del 20% en México. En el país azteca, hasta el banco que preside Ana Botín ha emitido un 18% más de tarjetas, pese a ser un mercado donde no es el líder. En total, los clientes de las dos entidades adeudan casi 46.000 millones de euros a través de este producto, una cifra récord para ambos, lo que ha hecho que disparen la facturación en el último año más de un 30%.

Las subidas de tipos de interés y la inflación se han comido el ahorro de muchas familias durante 2022 y 2023, dos años en los que no se ha dejado de consumir y los hogares han tirado más crédito. Por su parte, las entidades financieras han incrementado los intereses de estas tarjetas a la misma velocidad que lo hacía el precio del dinero.

BBVA es un claro ejemplo de ello. En España llevó el interés de todas sus tarjetas de crédito al 21,6% TIN, situándose muy por encima de mercado, incluso por delante de entidades de crédito como Cetelem o Cofidis. Y en México cobra hasta un 46%.

Así, la deuda por tarjetas de crédito que tenían pendiente los clientes de BBVA ascendió a cierre del ejercicio a 21.609 millones, una cifra récord que el banco nunca había alcanzado, según los datos recopilados por ON ECONOMÍA. En este contexto, la entidad ha ingresado un 33% más por las comisiones que cobra al hacer uso de estas tarjetas, en concreto, 4.665 millones de euros.

La entidad destaca en sus cuentas que el año pasado creció un 24% en préstamos por tarjetas de crédito mientras que, en préstamos al consumo, la subida fue del 8,6%, y en hipotecas, de tan solo un 2%. Buena parte de su crecimiento se debe a México, donde el uso de las tarjetas de crédito se ha popularizado en los últimos dos años. BBVA es el banco más grande del país, de manera que elevó en un 21% la concesión de estas tarjetas, según explica en su informe anual.

En el país azteca, muchos de sus habitantes desconocen los riesgos de pagar a crédito con la tarjeta, ya que su uso no está tan extendido y todavía hoy un 80% de la población paga en efectivo. Por ello, los expertos alertan del riesgo que corren las entidades y los clientes, que pagan intereses de hasta el 50%, lo que puede traer mayor morosidad. Hasta la fecha este no es el caso de BBVA, donde su tasa de mora se sitúa en el 2,6%, aunque ha subido desde el 2,5% de un año antes.

BBVA también es una de las entidades líderes en Turquía, donde su crecimiento en tarjetas de crédito ha rozado el 80%, según revela el banco. Al igual que en México, se trata un país con población joven y no muy bancarizados, donde todavía puede seguir creciendo a estas tasas.

La entidad también crece en el resto de mercados donde opera, aunque los crecimientos no son tan altos y no detalla las cifras. Todo el sector financiero ha aprovechado las subidas de tipos en ambos lados del Atlántico para incentivar la contratación de tarjetas de crédito por encima de las de débito.

En este contexto, el banco vasco destaca en sus cuentas de 2023 que cerró el año con 32,6 millones de tarjetas de crédito en circulación, casi un 12% más que un año antes. Se trata de un crecimiento mayor al de las tarjetas de débito (9,9%) aunque este tipo de plásticos es más habitual entre sus clientes, BBVA tiene 98,2 millones a nivel grupo.

Santander supera los 24.000 millones en tarjetas

Santander también ha sacado partido al auge del consumo. A cierre del pasado ejercicio, los clientes del banco cántabro le debían 24.371 millones de euros mediante tarjetas de crédito. Se trata también de una cifra récord, según los datos consultados por ON ECONOMÍA, que creció un 7,3% respecto a 2022 en un contexto en el que las familias siguieron gastando pese a contar con menos ahorros.  

De hecho, el crecimiento es mucho mayor si se compara con 2020. En la pandemia, las familias de todo el mundo ahorraron debido al confinamiento y la incertidumbre. Al tiempo, se dejó de gastar en ocio. Así, Santander redujo el saldo en tarjetas de crédito hasta los 19.000 euros, el nivel más bajo desde la crisis financiera, cuando también se dejó de gastar dado el contexto.

Pero desde entonces (entre 2020 y 2023) dicho saldo ha crecido un 25%. En consecuencia, el banco también ha ingresado más. En concreto, 4.300 millones en comisiones por tarjeta de crédito, un 33% más que en 2022.

Santander también destaca en su informe anual que en México se ha consolidado como el tercer banco en tarjetas de crédito con una cuota del 14%. La empresa emitió un 18% más de tarjetas pese a la fuerte competencia. Así pues, BBVA y Banorte son el primer y segundo banco más grandes del país.