La subida de las cotizaciones, la incesante inflación y las subidas de salario mínimo interprofesional (SMI) son los causantes de la destrucción de 3.899 microempresas (las que tienen menos de 10 empleados), según un estudio publicado este lunes por Cepyme. Este análisis, el cual está basado en datos oficiales de la Seguridad Social determina la subida de las cotizaciones, el elevado IPC y los aumentos del SMI son los tres factores que han impulsado la desaparición de pequeños negocios en el último año. La realidad es que, desde principios de 2022 hasta la actualidad, la coyuntura económica se ha visto apretada por un sinfín de problemas macroeconómicos que han terminado por afectar al empleo.

Hasta el pasado febrero, en España había 1.122.782 microempresas, un 0,3% menos que las que había en febrero de 2022. Pese a que no es una variación abrupta, sí que es un descenso esclarecedor de los problemas que se vienen dado en el terreno macroeconómico español. Todo ello teniendo en cuenta que, pese a que los precios han estado en sus cotas más elevadas de los últimos años, España ha logrado minimizarlos, siendo uno de los Estados miembro con los niveles de IPC más bajos.

El sector agrario, el que más microempresas ve desaparecer

Pese a ello, en el país ibérico, las microempresas han ido desapareciendo, acumulando cinco meses consecutivos de descensos con la caída del mes de febrero. Desde Cepyme también advierten de que la disminución de los pequeños negocios ha sido “especialmente intensa” en las actividades grupadas en el sector de la agricultura, la ganadería y la pesca (-3,8%). Por otro lado, desde la institución destacan que en la industria (-1,6%) y los servicios (-0,1%) también se ha notado descenso de los pequeños negocios. Concretamente, el sector agrario, el ganadero y el pesquero ha perdido 3.443 microempresas en un año; por su parte, la industria ha cerrado 1.209 pequeños negocios, mientras que los servicios han notado una reducción de 1.225 microempresas.

Por otro lado, y dando la nota positiva, destaca la creación de pequeñas empresas en el sector de la construcción. En la tasa interanual, el número de microempresas de este sector han crecido un 1,7%, acercándose su cifra total a los máximos registrados en 2008.

Pese al crecimiento de los pequeños negocios en el sector de la construcción, Cepyme remarca la problemática de que, en el sector agrario, ganadero, pesquero, y en el de la industria y de los servicios, baja el número de microempresas, algo que “no se producía desde 2013, exceptuando el periodo de la pandemia”, explican desde la organización empresarial.

Crece el número de empresas de más de 500 empleados

Aunque los datos referidos a la destrucción de pequeños establecimientos han caído, Cepyme también subraya que la creación empresarial viene siendo positiva, aunque en niveles inferiores a los marcados antes de la pandemia. En febrero, la cifra global de empresas creció un 0,2%, lo que lleva al número total de compañías hasta los 1.316.527, siendo la última subida la primera que se da en los últimos cinco meses.

La organización empresarial explica que es las empresas más grandes, son menos vulnerables a las subidas de SMI y al alza de las cotizaciones. La inflación sí que sigue siendo un problema para las empresas más grandes. Y es que, la escalada de los precios se ha convertido en el mayor problema de todas las firmas empresariales, no solo en España, sino en todo el mundo. Las empresas, indistintamente del tamaño que tengan, han tenido que hacer frente a la subida de los precios, lo que ha elevado los costes, algo que, también se ha llevado por delante a varias compañías o ha obligado a otras tantas a trasladar el encarecimiento de los costes al precio final de los productos.

Desde Cepyme destaca que las grandes empresas de más de 500 empleados, las cuales son “menos permeables a la subida del SMI, en particular, y al alza de los costes laborales, en general”, crecieron un 5,6% en términos interanuales, con 130 compañías más, hasta un total de 2.440.