Aena ha dado un nuevo paso en su expansión internacional. A través de su filial Aena Desarrollo Internacional, el gestor aeroportuario ha llegado a un acuerdo con la empresa de inversiones InfraBridge para adquirir la mayor parte del capital de una sociedad holding. Esta sociedad será propietaria y gestora de la totalidad del aeropuerto de Leeds Bradford y de una participación sustancial en el aeropuerto de Newcastle, ambos situados en el Reino Unido.
La operación, valorada en 309 millones de euros, está prevista que se cierre durante la primera mitad del año 2026, una vez se hayan obtenido todas las aprobaciones regulatorias necesarias. Este movimiento es esencial para entender la estrategia de Aena en el mercado británico, donde ya ejerce un papel clave como gestor del aeropuerto de Londres Luton, propiedad también en parte de InfraBridge. Con esta operación, InfraBridge se consolida definitivamente como el socio estratégico preferente de Aena en el Reino Unido, creando una alianza poderosa en el sector aeroportuario.
La importancia de este movimiento se visualiza en las cifras: con la suma de los nuevos aeropuertos a sus activos actuales, Aena pasará a gestionar infraestructuras que acogen aproximadamente 26 millones de viajeros anuales en el territorio británico. Maurici Lucena, presidente y consejero delegado de Aena, ha calificado esta operación como un paso importante en países con un gran potencial como el Reino Unido, un territorio donde la empresa acumula una larga experiencia. Lucena ha remarcado la visión estratégica de la compañía, que busca crecer de manera selectiva en las geografías donde ya está presente.
La puerta de una región industrial y turística
El aeropuerto de Leeds Bradford es un activo no regulado situado en el corazón del norte industrial y turístico de Inglaterra. Sirve a las regiones de Yorkshire y Humber, un área densamente poblada y con una amplia área de captación de pasajeros. Su ubicación en una de las principales zonas económicas fuera de Londres lo convierte en un eje vital para el transporte. Su tráfico, de perfil básicamente turístico y hacia destinos europeos, tiene como actor principal la aerolínea de ocio Jet2.com, que tiene una base operativa importante desde hace más de dos décadas. El aeropuerto está actualmente inmerso en un profundo proceso de transformación llamado con un plan integral que busca modernizar completamente las instalaciones y mejorar la experiencia de los viajeros a través de obras de ampliación.
Por su parte, el aeropuerto Internacional de Newcastle ofrece un perfil diferente pero igualmente atractivo. Situado en el noreste de Inglaterra, disfruta de una posición privilegiada, casi de monopolio en su área de influencia, sin competidores directos en un radio muy amplio. Esta situación, sumada a su gran superficie de terreno disponible para nuevos desarrollos, lo convierte en un activo con un fuerte potencial de crecimiento. Su tráfico también es mayoritariamente turístico y europeo, pero con una mayor diversificación de aerolíneas, lo que aporta estabilidad. Sus resultados económicos son robustos, con unos márgenes de explotación muy destacables, y su gestión actual incluye una participación significativa de los consejos municipales locales.
En conjunto, esta adquisición permite a Aena diversificar y fortalecer su presencia británica más allá de Londres, penetrando en dos mercados regionales fuertes y complementarios. No se trata solo de una inversión financiera, sino de un movimiento estratégico que le permite apostar por el ámbito no regulado, donde tiene más margen de gestión, y aprovechar el conocimiento y las alianzas locales de su socio InfraBridge. La operación refleja la voluntad de Aena de consolidarse como un actor global en la gestión aeroportuaria, aprovechando su experiencia para gestionar y desarrollar infraestructuras en mercados maduros con oportunidades de valorización, como es el caso del Reino Unido.