La Unión Europea y Estados Unidos han consensuado un documento por escrito con los términos del acuerdo que lograron en julio para evitar una guerra arancelaria, por el que Washington impondrá un arancel del 15% a la mayoría de importaciones europeas y Bruselas se compromete a comprarle más energía y material militar.
Los embajadores de los Estados miembros ante la Unión Europea se han reunido durante la mañana de este jueves con el Ejecutivo comunitario para conocer los detalles de esta declaración conjunta, que llega casi un mes después de que la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el presidente de EE.UU., Donald Trump, llegaran a un acuerdo político para evitar la guerra arancelaria.
El comisario europeo de Comercio, Maros Sefcovic, ha sido el encargado de dar cuenta de los detalles del texto pactado a los medios de comunicación. Con esta rúbrica se pone negro sobre blanco lo consensuado entre Trump y Von der Leyen en un encuentro que tuvo lugar en Escocia y con el que se puso fin a la guerra comercial iniciada por el presidente americano. En esa reunión, ambos llegaron a un acuerdo que contempla que EE.UU. imponga un arancel tope del 15% a la mayoría de productos de la UE (aproximadamente a un 70% de su comercio con el gigante americano) y que el bloque comunitario compre bienes estadounidenses estratégicos como energía o chips por valor de 750.000 millones de dólares, entre otras medidas.
Bruselas defendió que el acuerdo político, que no fue bien recibido en muchas capitales comunitarias, permitía evitar una guerra arancelaria en la que Trump había amenazado con imponer aranceles generalizados del 30% a las importaciones europeas e incluso superiores en ciertos sectores.
A nivel político, los grupos del Parlamento Europeo criticaron el acuerdo comercial, porque lo consideraban "delirante", una "vergüenza" y una capitulación. Incluso los gobiernos comunitarios tuvieron que relativizar el acuerdo ante las quejas de empresarios y trabajadores. Entre ellos, el gobierno español y sus socios que acogieron el acuerdo arancelario entre la Unión Europea y Estados Unidos con ciertas reservas: el presidente, Pedro Sánchez, lo respaldó aunque "sin ningún entusiasmo" y la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, lo calificó de "magnífico error". También Francia y Alemania lo criticaron.
Estados Unidos espera recaudar 50.000 millones de dólares al mes con los aranceles
Hasta la fecha solo se ha hecho efectivo el arancel máximo del 15% impuesto por Washington a la UE, pero quedaba pendiente detallar por escrito qué productos europeos quedaban incluidos en dicho tope, que podría afectar los automóviles, los semiconductores o el sector farmacéutico. Durante las negociaciones, el propio Trump ha mantenido la incertidumbre al amenazar con situar los aranceles en un 35% si la UE no cumplía con su parte del trato.
Estados Unidos ingresará alrededor de 50.000 millones de dólares (43.050 millones de euros) mensuales por medio de los aranceles, según el secretario de Comercio estadounidense, Howard Lutnick.
Además, el secretario de Comercio de EE.UU. ha advertido de que a esta cifra de ingresos arancelarios mensuales habría que añadirle en el futuro los relacionados con las importaciones de semiconductores y los productos farmacéuticos, además de otros ingresos adicionales, por lo que la recaudación podría seguir aumentando hacia el billón de dólares que apuntaba el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.