Catalunya recibió un total de 2.352.229 turistas internacionales durante el mes de julio, lo que supone una reducción del -1,16% respecto al mismo mes del año anterior, con un gasto de 3.287,61 millones, un 5,2% más, según los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE). De media, cada turista que visitó la comunidad gastó al día 229 euros en julio, un 4,34% más que el mismo mes del año anterior, y permaneció 6,1 días en Catalunya.

En total, el gasto medio por persona se situó en 1.398 euros, un 6,46% más que en julio del año anterior. En lo que va de año hasta julio, 11.603.807 turistas han visitado Catalunya (+1,14%) y han dejado un gasto en la región de 13.847 millones de euros (+2,98%). Por comunidades, la región más visitada fue Baleares con el 23,28% del total de turistas internacionales que viajaron al país, seguida de Catalunya (21,34%) y Andalucía (13,98%).

Los últimos datos de la Generalitat y del Observatorio Turístico indican una recuperación robusta, con una previsión de superar los 19 millones de visitantes en 2025, rozando así los números récord de 2019. Sin embargo, el perfil del viajero y los destinos prioritarios están experimentando una transformación significativa. El perfil del turista internacional, mayoritario en Catalunya se mantiene fiel: franceses, británicos y alemanes lideran el ranking. No obstante, se observa un crecimiento destacado de visitantes estadounidenses, un segmento muy valorado por su alto gasto medio y su interés por la cultura y la gastronomía local.

La masificación en ciertos puntos de Barcelona y la presión sobre el mercado de alquiler vacacional siguen siendo problemas por resolver. La administración apuesta por herramientas como la tasa turística para financiar la gestión de los flujos de visitantes y promover un turismo sostenible. Si bien Barcelona sigue siendo el imán indiscutible, acogiendo cerca de la mitad del total de pernoctaciones, destinos como la Costa Brava y las Terres de l’Ebre ganan peso. El otro gran frente es la estacionalidad. Los esfuerzos se centran ahora en desestacionalizar la demanda, promocionando los atractivos de la región durante la primavera y el otoño.

En clave estatal, España, durante los primeros siete meses del año, registró la llegada de 55,5 millones de visitantes internacionales. Personas que generaron un gasto de 76.074 millones de euros. Solamente en julio, España recibió 11,02 millones de turistas, el 1,6% más que en el mismo periodo de 2024 y la cifra más elevada para dicho mes de toda la serie histórica.

Se gastaron 16.452 millones de euros, un 6,1% más, un dato también récord para ese mes. Estos datos se producen después de que en el primer semestre del año se batieron récords históricos tanto de número de turistas, con 44,5 millones, como de su gasto asociado, con 59.622 millones.

Además, ya son dos años consecutivos en los que entre enero y julio España supera los 50 millones de turistas extranjeros. Los principales países emisores en los siete primeros meses fueron Reino Unido (con cerca de 11 millones y un aumento del 4,3%), Francia (con más de 7,1 millones, el 1,7% más) y Alemania (con más de 6,9 millones, un 1,6% más). A continuación se situó Italia (3,2 millones, el 6,7% más), Países Nórdicos (3 millones, el 1,3% más) y Países Bajos (2,9 millones, un 4,2% superior).