El acuerdo que se consiguió entre PSOE y Sumar para reeditar un gobierno de coalición el pasado 2023, incluye una propuesta de reducción de la jornada laboral gradual de 38,5 horas en el 2024 y 37,5 horas en el 2025, con un horizonte de 35 horas semanales, sin reducción salarial. Así pues, el debate de la reducción de jornada, también se tiene que remitir a la negociación colectiva, sector por sector.
Ojo con los convenios
A modo de ejemplo, muchas empresas y patronales como la CEOE o Confemetal recuerdan que se tiene que tener en cuenta el incremento de costes laborales y la merma de la productividad, en especial cuando existen propuestas de reducción de jornada a 4 días a la semana, con un aumento significativo en los días de permisos para ausentarse del trabajo, y siendo necesarias medidas compensatorias e incentivos en las empresas. U otro aspecto a trabajo es el incremento notable del absentismo por incapacidad temporal, siendo necesario un mayor control y la adopción de medidas a favor de la viabilidad de las empresas.
Por lo tanto, a grandes rasgos, esta medida supone una modificación del Estatuto de los Trabajadores, ya que la normativa establece hasta ahora un máximo de 40 horas semanales a jornada completa. Eso es así desde el año 1983. Con anterioridad a este año, la jornada semanal era de 42 horas a jornada continuada y 43 para la jornada partida. El principal beneficio lo encontramos en la parte económica. Cuándo se implemente la reducción de la jornada laboral, afectará de manera positiva a los salarios de los trabajadores. Como, según aclara Comisiones Obreras, estima que "tus horas de trabajo serían las mismas, pero aumentaría tu salario mensual porque tu jornada supone un porcentaje de la jornada completa equivalente. Si este porcentaje sube, también tiene que crecer tu salario para mantener la equivalencia".
Beneficios para el bolsillo
Y citan un ejemplo: Si tienes la jornada máxima legal, 40 horas semanales, pero trabajas 20 horas y la jornada se reduce a 37,5 horas, tu jornada pasaría del 50% al 53,3%, por eso cobrarías un 3,3% más. La empresa puede decir que reduce el tiempo de trabajo para no pagar más pero no lo podrá imponer. Pero, a la vez, también admiten que "cada caso es un mundo", refiriéndose a la complejidad de cada lugar y sus propios convenios.
A partir de aquí, habrá que ver las consecuencias en el corto plazo cuando se aplique todo. Según un informe reciente publicado por el BBVA Research sobre la "Situación España", la rebaja de horas de trabajo que se plantea desde el gobierno de Pedro Sánchez en base al citado acuerdo PSOE-Sumar, desde las 38,5 horas en el 2024 hasta llegar a las 37,5 horas en el 2025, quedaría entorno de seis décimas al crecimiento medio anual del PIB durante el próximo bienio y ocho décimas en el de ocupación. Eso significaría que se perderían de golpe 7.800 millones de crecimiento y cerca de 100.000 puestos de trabajo "de no tomarse medidas compensatorias que alivien la tensión en los costes laborales". Estos datos, son todavía mayores, según el Observatorio Económico de la Universidad Francisco de Vitoria.