España acepta el compromiso de llegar al 2% del PIB su presupuesto por defensa, pero califica "incompetente", en palabras del ministro de Indústria, Jordi Hereu, la exigencia de llegar al 5% que Donald Trump trasladó a la OTAN en los países miembros durante la cumbre celebrada estos días. El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, se opuso a esta medida y la tildó de "irracional", aludiendo a que primero hay que fijar los objetivos y después los presupuestos. Horas después, la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, reiteraba que Trump "ha dejado claras nuestras prioridades para nuestros aliados, incluido España", en alusión directa a la oposición de Sánchez.
El ministro Hereu, a su llegada al Congreso del Colegio de Economistas de Catalunya, ha asegurado que es "incompetente" llegar al 5%. "España siempre ha sido un socio fiable de la OTAN y en los últimos años siempre hemos incrementado el esfuerzo en Defensa. Sacralizar algunos porcentajes es inconveniente. Estamos administrando el esfuerzo desde política industrial del 2% del PIB de un país en crecimiento. Eso es un esfuerzo enorme. Por eso, expresar que asumiremos el 2% hasta el 2029, con un país que está presente en muchos frentes es lo que tenemos que poner en valor", ha desarrollado Hereu.
"Estamos maximizando el esfuerzo industrial y un 2% es muy buen esfuerzo. El 5% es exagerado. Tenemos que mantener las políticas de sanidad, educación y seguridad, sería un aumento exagerado", ha dicho Heredero, que también ha defendido el PSOE ante los casos de corrupción recientemente conocidos implicando Santos Cerdán. "Estas actitudes no tienen cabida al PSOE y quien falta a la honestidad es apartado", ha dicho, así como ha defendido que "el proyecto de este gobierno es más necesario que nunca".
El aumento de esfuerzo económico en armamento y defensa parte de un compromiso con Europa que prevé que España pase del 1,3% al 2% de su Producto Interior Bruto. El Gobierno presentó después un plan donde explicaba cómo y en qué se invertirían estos 10.471 millones extras para llegar a este punto.
Aunque Sánchez prometió que no se tocaría ni un euro" de gasto social, hay dudas que eso sea posible. España se ha comprometido, antes del rearme, a una reducción de deuda pública para cumplir las nuevas normas de compromiso fiscal de la Unión Europea, que exige reducir la deuda pública del 105,3% actual del estado a quedar por debajo del 60% y pasar de un déficit público que bordea el 3%, tope de las normas fiscales europeas.
Cierto es que Europa abrió la vía a más deuda pública mancomunada cuando lanzó el plan Rearm Europe que tiene que movilizar más de 800.000 millones de euros.
La otra vía, que apuntó el mismo Sánchez, es utilizar dinero de los Planes de Recuperación, Transformación y Resiliencia poscovid no ejecutados. Según el plan presentado por el Gobierno, de aquí saldrán 1.357 millones de euros. 2.819 saldrán de la menor necesitado de fondo de liquidez de las comunidades autónomas, 1.680 millones del reintegro de préstamos concedidos por el ministerio de Industria y otros créditos disponibles, 1.396 millones de los fondos de contingencia, 1,744 millones de créditos ya ejecutados que no tienen reflejo en 2025. Los ingresos de servicios prestados por el ministerio de Defensa tienen que generar 632 millones y las menores anualidades por lo que aportará la UE 641 millones.
El Banco de España redujo el impacto en la economía española del 0,7% al 0,1% de crecimiento del Producto Interior Bruto. Y apuntó que "el efecto multiplicativo sobre la actividad económica sería más elevado que el contemplado si en el escenario de estas proyecciones si el gasto asociado se concentrara, todavía más que lo que es habitual, en bienes de inversión de origen nacional".
El plan prevé repartir los fondos en cinco partidas: el 35% (3.712 millones) en las condiciones laborales y equipamientos del ejército, el 31% (3.262 millones) a nuevas tecnologías de comunicación y ciberseguridad, el 18,75% (1.962 millones) en instrumentos de defensa y disuasión, el 16,73% (1.751 millones) a apoyo para emergencias y desastres naturales y un 3,14% (328 millones) en misiones en el exterior.