Pedro Sánchez, presidente del Gobierno de España, ha anunciado este martes que destinará 4.000 millones de euros para financiar otras 43.000 viviendas, las cuales irán destinadas a alquileres asequibles. El objetivo, ha dicho el presidente del Ejecutivo estatal, no es otro que llevar al 20% la oferta de la demanda de vivienda pública, frente al 3% anual. El Gobierno español no repliega velas en su labor de facilitar el acceso a alquileres a jóvenes y familias con rentas bajas.

El presidente del Gobierno estatal ha afirmado en el Congreso de los Diputados que quiere convertir a la vivienda en el quinto pilar del estado de bienestar, por lo que el Ejecutivo ha optado por financiar otras 43.000 viviendas, las cuales irán destinadas a alquileres asequibles y se unirán a los 50.000 inmuebles movilizados de la Sareb, el ‘banco malo’, el cual ha copado las primeras planas de los medios de comunicación en los últimos días. Por lo que, en total, serán 93.000 viviendas las que el Gobierno español pone en disposición del mercado para alquileres asequibles.

Durante la intervención del presidente, en la que ha presumido del crecimiento económico que ha experimentado España, además de la creación de empleo y de tener una de las tasas de inflación más bajas del Viejo Continente, Sánchez ha afirmado que las 43.000 viviendas destinadas a alquileres asequibles serán tanto de nueva construcción como de rehabilitación. Además de ello, el máximo mandatario del Gobierno español ha aclarado que las viviendas serán financiadas creando una nueva línea del ICO de 4.000 millones de euros con los fondos europeos. La medida anunciada este miércoles se une a la movilización de las viviendas de la Sareb, al igual que la aprobación de la Ley Vivienda, a poco más de un mes de las elecciones locales y autonómicas, algo que, por ejemplo, para los socios del Gobierno, son medidas electoralistas, como expresaron durante la jornada de ayer Unidas Podemos, ERC o Bildu, entre otros. 

Sánchez quiere acabar con el ‘modelo del PP’

La justificación que ha dado para llevar a cabo esta medida es la de acabar con el “modelo neoliberal basado en la ley del suelo del PP, que privatizó la vivienda pública y puso un modelo fiscal negativo que trajo paro, corrupción y desigualdad”. En los últimos días, el Gobierno español ha estado implementando medidas relacionadas con la vivienda y un acceso más sencillo a ella. Pese a que la nueva Ley Vivienda, como también la movilización de los 50.000 inmuebles de la Sareb han desatado las críticas tanto de la oposición como de los socios del Gobierno, Sánchez cree conveniente mejorar desahogar el bolsillo de los ciudadanos más vulnerables a través de alquileres asequibles, los cuales facilitarán el acceso a la vivienda a jóvenes y a familias con menor capacidad adquisitiva.

La financiación de estas 43.000 viviendas se une a las 50.000 casas movilizadas por la Sareb, medida que, durante la jornada de ayer, fue aprobada en el Consejo de Ministros. En total, serán 93.000 viviendas las que el Gobierno lanzará al mercado para alquileres asequibles, una medida con la que esperan que se descongestione el mercado y se facilite la entrada de los ciudadanos con las rentas más bajas a una vivienda.

Una medida que se une a la movilización de las viviendas de la Sareb y a la Ley Vivienda

En cuanto a las condiciones, Pedro Sánchez ha explicado este martes que las viviendas deberán cumplir en materia energética y debe ser de alquiler social o cesión de uso de al menos 50 años. “Vamos a hacer del acceso a la vivienda un derecho y no un problema, porque no hay nada más constitucional que la nueva Ley de vivienda y convertir vivienda en el quinto pilar del estado de bienestar”, ha explicado el presidente del Gobierno de España.

El anuncio de este miércoles se une a la aprobación de la nueva Ley vivienda, la cual, entre otras cosas, fija un tope del 3% en 2024 a las subidas del alquiler, y creará un índice ajeno al IPC para evaluar las subidas y precios de los alquileres. Además de ello, la financiación de estas 43.000 viviendas se une a las 50.000 movilizadas de la Sareb, un movimiento que, durante la jornada de ayer, recibió críticas por parte de Unidas Podemos, ERC o EH Bildu, entre otros, al considerar que se trataba de una medida electoralista.

El partido morado tildó la medida de electoralista y recordó que el PSOE no contempló la movilización de viviendas de la Sareb hace tan solo seis meses, ya que, en ese momento, alegaban que no había inmuebles suficientes como para acometer dicha medida. Javier Sánchez-Serna, coportavoz de Unidas Podemos, mostró su satisfacción por ver como “las ideas” del partido liderado por Ione Belarra “abren camino”. Aunque desde Podemos ven acertada la movilización de estas viviendas, creen que esas 50.000 viviendas son una cifra “modesta”, y que se deberían movilizar “todas” las viviendas del ‘banco malo’.

Sea como fuere, y pese a que otros socios del Gobierno español cargaron contra el “electoralismo” encubierto que tiene esta medida, se trata de uno de los cambios más sustanciales en materia de vivienda que se han visto en los últimos años. Con el anuncio de este miércoles, el Ejecutivo estatal lanzará al mercado 93.000 viviendas, las cuales estarán destinadas a facilitar el acceso a la vivienda a los españoles más vulnerables económicamente. Con la financiación de las 43.000 viviendas, Sánchez espera elevar la demanda de vivienda pública del 3% actual hasta el 20%, mejorando los datos de parque público de vivienda que, a juicio del presidente, son “ridículos y “bochornosos” en comparación con los de otros países de la eurozona.