La segunda edición del World Token Congress 2025 (WTC25) ha concluido este jueves con un gran éxito de participación y contenidos, cerrando sus puertas esta semana en la sede de Foment del Treball. El evento, que se consolida como cita ineludible en el calendario tecnológico europeo, ha ratificado Barcelona como una de las capitales continentales de referencia para el desarrollo y la aplicación práctica de la tokenización, la tecnología blockchain y los activos digitales en el ámbito empresarial. La patronal ha logrado reunir a más de 500 profesionales procedentes de todos los ejes del tejido productivo.
La audiencia ha integrado desde altos directivos de grandes corporaciones hasta representantes de pymes y empresas emergentes con propuestas revolucionarias. Todos ellos han compartido casos de uso, retos y soluciones que demuestran cómo estas tecnologías ya no son una promesa futurible, sino una herramienta que está transformando con rapidez y profundidad los sectores de la economía real. El congreso, fruto de una alianza estratégica entre Foment del Treball y la CEOE, ha demostrado ser mucho más que un foro de debate. Se ha erigido en un espacio de trabajo operativo, un taller donde la innovación tecnológica más avanzada se traduce, paso a paso, en oportunidades comerciales y de eficiencia concretas para las empresas de todos los sectores y tamaños.
La sesión inaugural estuvo presidida por la vicepresidenta de Foment del Treball, Mar Alarcón, quien destacó el papel fundamental de la organización como puente indispensable entre la investigación tecnológica y la aplicación empresarial. En su intervención, Alarcón situó sin ambigüedades la digitalización y la adopción de tecnologías emergentes como la blockchain entre las prioridades estratégicas absolutas de Foment para la próxima década, con el objetivo último de reforzar la competitividad internacional de las empresas catalanas y españolas.
La vicepresidenta lanzó un mensaje de confianza en el potencial del territorio. “Catalunya dispone del talento y del tejido empresarial para liderar esta nueva economía digital en Europa”, defiende Alarcón. Esta afirmación marcó el tono de un discurso pragmático y orientado a los resultados. Alarcón insiste en la necesidad de concretar que “no estamos aquí para hablar de futuribles, sino de soluciones que ya funcionan”. También remarca que tanto la tokenización como el blockchain han trascendido la fase de prototipo para convertirse en “una infraestructura digital que mejora la eficiencia y la transparencia” de los procesos empresariales, y define el objetivo central del congreso como el de “aterrizar la tecnología en la realidad del negocio”.
De los conceptos generales a la aplicación vertical
Maria Mora, directora de Innovación de Foment y moderadora de las dos jornadas, ha puesto de relieve la evolución madura que ha experimentado el congreso desde su primera edición. “El año pasado, siendo la primera edición, el congreso ofreció una visión más amplia y general”, recuerda Mora. “Este año apostamos por verticales específicas y por enfoques diferentes para entender cómo esta tecnología está transformando muchos de los sectores productivos de nuestra economía”, apuntan desde la patronal. Este enfoque sectorial responde a una voluntad explícita de generar impacto medible.
“Queremos que cada sesión ayude a resolver dudas, inspire proyectos y abra oportunidades para empresas de todos los tamaños”, puntualiza Mora. Su visión del congreso lo define como “un puente entre empresas tradicionales y tecnólogos”. La intervención de Mora culminó con una reflexión poderosa y una llamada a la acción personal que resonó en toda la sala, resumiendo el espíritu de la edición: “Este congreso no ha sido un escaparate, ha sido un espejo. Ahora toca mirarlo de cerca. Me gustaría que salierais de aquí con deberes: identificar al menos una oportunidad real para vuestra empresa. La tecnología ya está lista. La pregunta es si nosotros también”.
El compromiso institucional con este ecosistema quedó patente con la intervención de Xavier Mayo, jefe de la oficina de inversiones del Ayuntamiento de Barcelona. Mayo reforzó la voluntad de la ciudad de desarrollar un hub de alta innovación especializado en activos digitales y blockchain, una apuesta alineada con los objetivos del plan estratégico de la capital catalana. El evento, según Mayo, es una pieza clave en esta estrategia para “atraer inversión, proyectos tecnológicos y talento internacional”.
La perspectiva desde la óptica de la gran patronal española llegó de la mano de César Maurín, director del departamento de Digitalización, Innovación, Comercio e Infraestructuras de la CEOE. Maurín ofreció una visión panorámica de dos décadas de transformación digital acelerada. Su discurso ha sido una defensa del pragmatismo y la creación de valor. El representante de la CEO argumenta que herramientas como la IA generativa, la tokenización y el blockchain solo adquieren sentido cuando aportan un valor claro en ámbitos como la productividad, la experiencia de cliente, la optimización de procesos internos o la analítica avanzada de datos. Finalmente, Maurín lanzó una alerta y una reivindicación para el contexto europeo: es imprescindible que el continente “combine su liderazgo regulador con más inversión y ambición tecnológica” para no quedar relegado en la nueva carrera digital global.