Desde el 2 de abril ya se puede llevar a cabo la declaración de la Renta en España. En el caso de los trabajadores autónomos, y ante una presión fiscal cada vez más elevada, es clave conocer las deducciones a las cuales pueden acogerse para optimizar su declaración del IRPF.
En total, en España hay más de 3 millones de trabajadores autónomos y los agentes de la Administración están muy pendientes de sus movimientos. Y es que entre los objetivos de la Agencia Estatal de la Administración Tributaria (AEAT) está el hecho de detectar los fraudes, ya que en los autónomos y los pequeños comercios se suelen producir la mayoría de las infracciones que acaban pasando desapercibidas por la administración.
Una finalidad clave de la Agencia Tributaria es reducir al máximo la economía sumergida y, por este motivo, dentro del nuevo plan de control tributario, han señalado que pondrán más el foco en los autónomos y en las pequeñas empresas para comprobar que cumplen con sus obligaciones fiscales.
¿Cuáles son los motivos por los cuales Hacienda puede abrir una investigación?
De hecho, una inspección puede ser de carácter parcial o general. De primeras, siempre tendrá carácter general, que quiere decir que afectará a la totalidad de una obligación tributaria. Hacienda revisa todas las declaraciones del período a comprobar para descubrir si hay impuestos declarados de forma errónea o directamente sin declarar. Sin embargo, también pueden tener carácter parcial y afectar a un solo elemento de un impuesto o declaración. Estos son algunos casos que pueden hacer a Hacienda inspeccionar de manera más profunda a estos trabajadores.
Otra opción sería que las cuentas no cuadraran. Y en concreto es uno de los motivos más comunes de la Agencia Tributaria para decidir investigar a un autónomo o pequeña empresa o no. Sea de manera intencionada o por un error en la contabilidad, si desde la Agencia Tributaria detectan un desajuste entre las cuentas trimestrales en las declaraciones del IVA o el IRPF con los modelos anuales sería otro motivo de inspección.
Otro motivo por el cual un autónomo se puede someter a una investigación es por no haber declarado subvenciones, prestaciones o ayudas percibidas. No hacerlo puede comportar al trabajador una sanción grave y una investigación por parte de Hacienda. Sobre todo ahora, que el número de ayudas ha crecido mucho. Por ejemplo, las ayudas concedidas por las comunidades autónomas a los trabajadores por cuenta propia o las prestaciones por el cese de una actividad.
Reclamar devoluciones de IVA por cantidades considerablemente elevadas, especialmente de forma recurrente, también pueden levantar sospechas. Para evitar estas situaciones es clave saber qué elementos se pueden deducir los autónomos y cuáles no.
Por todas estas razones, los técnicos de Hacienda suelen incrementar las investigaciones a las personas autónomas, ya que cuentan con mayor volumen de información y querrán saber los motivos en caso de detectar errores o datos desconcertantes tanto antes como durante y después de la campaña de la declaración de la Renta.
¿Cómo saber si Hacienda me investiga?
Si una persona tiene sospechas de que Hacienda le investiga, lo sabría. La Agencia tributaria se rige por el principio de transparencia, por lo que tienen la obligación de notificar a la persona si inicia un procedimiento de inspección. En concreto, la Agencia Tributaria dice: "los obligados tributarios deben ser informados al inicio de las actuaciones del procedimiento de inspección sobre la naturaleza y alcance de las mismas, así como de sus derechos y obligaciones en el curso de tales actuaciones".