Con cada avance o descubrimiento de la NASA los seres humanos nos sentimos un poquito más pequeños o abiertos a reconocer que el universo no existe tal cual como lo imaginamos.
A través del telescopio espacial de la NASA se pudo conocer sobre un choque de dos galaxias, algo de lo que de momento no se tenía registro.
Colisión de dos galaxias lejanas a la tierra
Si algo podemos agradecer a la NASA es la gran cantidad de informaciones que ha logrado recabar gracias a su telescopio Hubble. Según la propia institución, se ha podido observar un extraño triángulo de estrellas que han sido creadas debido a la colisión frontal de dos galaxias.
La encargada de dar a conocer la información fue la astrónoma Julianne Dalcanton, quien trabaja en el Centro de Astrofísica Computacional del Instituto Flatiron en Nueva York y la Universidad de Washington en Seattle.
El extraño triángulo
Ambas galaxias son conocidas como arp 143 para la NASA. Sin embargo, dentro del choque, se encuentra otra Galaxia que se tenía reconocida como NGC 2445. La lluvia de estrellas se encuentra muy lejano de la tierra, pero no deja de ser algo majestuoso.
¿Cómo se explica el fenómeno?
Aunque si bien los anillos de formación estelar no son novedad para la NASA, lo que se muestra como llamativo es que se ha generado una especie de triángulo estelar.
La institución asegura que esto se forma porque las galaxias están muy cerca una de otra. Desde el Hubble se puede ver que la galaxia NGC 2444 se aferra gravitacionalmente a la otra galaxia.
How’s this for 2/22/22?
— Hubble (@NASAHubble) February 22, 2022
A cosmic tug-of-war between two galaxies known as Arp 143 plays out in a new Hubble image.
The galaxy on the right has pulled gas from its companion, forming a “triangle” of bright star formation: https://t.co/v05tjsrXYI pic.twitter.com/sKr1bbKAJs
Básicamente, ninguna de las dos se encuentra completamente libre de la otra. Es una especie de “tira y afloja” que se ejecuta entre las dos galaxias. Una batalla que pareciera ir ganando NGC 2444.
Aunque si bien la mayor parte de la acción se libra en la NGC 2445, esta se ha logrado estirar y adquirió una forma bastante extraña. De cualquier manera, se puede asegurar que ambas son parte de un fenómeno nunca antes capturado por un telescopio satelital.