La villa de Tagamanent (Vallès Oriental, dentro de la Reserva de la Biosfera del Montseny) acogerá el próximo año de la primera planta de lavado y tratamiento de lana ovina de Catalunya. Lo hará gracias a una subvención de 531.341,42 euros de la Agencia de Residuos de Catalunya (ARC), que permite desarrollar un sistema de lavado y procesamiento de cantidades reducidas de lana como la que producen las explotaciones ganaderas más pequeñas de la zona. El sistema permitirá valorizar la lana desde su clasificación y lavado hasta el cardado y generando con ello un producto final con alto valor añadido y una potencial demanda en el mercado.
Respuesta a demandas
La iniciativa, explica la Generalitat, atiende las demandas de los ganaderos del área, que habían planteado una instalación como ésta con el fin de responder a la ausencia de plantas de este tipo en Catalunya y a la escasez de instalaciones similares al resto de España. La puesta en marcha de la planta podría impactar de manera positiva la industria textil catalana al reducir la huella de carbono asociada a la importación de lana y fomentar estándares ambientales más rigurosos en el procesamiento de este material.
Salida comercial
La trasquiladura anual es una necesidad para la salud de las ovejas, pero el auge de la moda rápida y la crisis del sector han dejado a los ganaderos con volúmenes significativos de lana que no tienen salida comercial y que se convierten en residuos. Los costes logísticos y de procesamiento han dificultado su valorización en el mercado textil, especialmente para las explotaciones más pequeñas. La nueva instalación les ayudará a poner en el mercado un producto de proximidad, de calidad, natural y renovable, y más sostenible ambientalmente que las fibras sintéticas con que se fabrican actualmente la mayoría de tejidos.
Esta actuación se enmarca en el Plan estratégico de la ganadería extensiva de Catalunya que, entre otros objetivos, apuesta por fomentar el uso de la lana y la piel en las diferentes industrias con el objetivo de mejorar el peso que tiene la ganadería extensiva en toda la cadena de valor.