La del veto de los Estados Unidos a Huawei para que la compañía china no pudiera seguir ofreciendo a sus clientes los servicios de Google, ha sido sin ninguna duda una de las noticias más relevantes del pasado 2019. Aunque desde la administración Trump han estado jugando, en cierta forma, al gato y al ratón, vetando al gigante asiático primero, dándole una moratoria después, para finalmente volver a cerrarle el grifo, aún no se sabe a ciencia cierta qué ocurrirá en el futuro a este respecto.
En cualquier caso, al parecer, desde la misma Huawei han tomado la decisión de que ocurra lo que ocurra desde el lado norteamericano, la compañía china no volverá a acceder al ecosistema de Google nunca más. Si es que en casos tan complejos como este, y en el que está en juego tanto dinero, se puede llegar a sostener una afirmación tan categórica.
Los últimos dispositivos de Huawei ya no pueden –al menos de momento– disfrutar de las aplicaciones y servicios de Google desde hace más de medio año. Eso obligó a la compañía a crear rápidamente una variante de Android sin Google para garantizar que puedan salir al mercado móviles como el Mate 30 Pro.
Aunque todo apunta a que Estados Unidos y China están cerca de llegar a un acuerdo y el veto a Huawei podría ser levantado pronto, el fabricante chino ha revelado que tiene previsto no volver a contar con los servicios de Google, pase lo que pase en las negociaciones entre las dos potencias mundiales.
Al parecer Huawei quiere deshacerse de una vez por todas de su dependencia de la política de Estados Unidos, ya que nadie puede asegurar que no se produciría otro nuevo veto después del actual. Por eso, el objetivo del fabricante oriental es la creación de un tercer ecosistema alternativo a Android e iOS.
Huawei desea que su particular versión de Android se parezca lo más posible a la de Google para no sobrecargar demasiado de trabajo a los desarrolladores de aplicaciones. Así, ahora mismo ya replica casi la mitad de las API más importantes a través de su Huawei Mobiles Services, que cuenta con un equipo de 4.000 desarrolladores. Asimismo, les gustaría poder recibir colaboraciones en forma de apps de otros gigantes estadounidenses como Whatsapp y Facebook, y para ello piensa en montar una empresa europea que opere desde el viejo continente de manera que no pudiera recibir vetos por su estatus chino.
En ningún caso creen que la tarea vaya a resultar sencilla ni mucho menos pero para poder tener cuantas más opciones mejor para ser independiente, Huawei ya ha realizado inversiones de varios miles de millones de dólares. Si finalmente no lo consiguen, que no sea porque no han puesto los medios suficientes.