Desde que Preston Tucker, aquel visionario que solo consiguió producir unas cuantas unidades de su fabuloso Tucker Torpedo, presentó –inspirándose en soluciones similares utilizadas en aviones- el primer cinturón de seguridad por automóvil y lo incorporó a su único coche comercializado han pasado 75 años. En los años 50, Ford incorporó este elemento de seguridad a sus vehículos como opción de equipamiento y en 1959 la sueca Volvo lo incluyó como elemento de serie en su modelo Amazon. Sin embargo, en Catalunya todavía se imponen demasiadas sanciones para no utilizarlo.
Campaña preventiva
Así, y hasta el 10 de septiembre, el Servicio Catalán de Tráfico activa junto con la policía autonómica y las diferentes policías locales una nueva campaña policial preventiva de uso del cinturón, casco y sistemas de retención infantil. Esta es la segunda campaña de este año orientada al uso de los dispositivos de seguridad pasiva y la decimocuarta de las campañas preventivas e integrales de las policías de Tráfico de Catalunya que el SCT coordinará este año
Casi 180 sanciones diarias
En la última campaña orientada al control del uso de los dispositivos de seguridad pasiva (mayo de 2023), los Mossos d'Esquadra y las Policías Locales impusieron un total de 1.255 denuncias en una semana, unas 179 diarias. De estas 1.255, el 85,74% corresponde en el cinturón de seguridad, en concreto, 1.076 sanciones. Hay que destacar que de estas multas para no llevar el cinturón, la gran mayoría, 683, fueron a conductores. Con respecto al resto de sanciones, 87 fueron por el casco y 92 por los sistemas de retención infantil. No utilizarlos o hacerlo de manera incorrecta, explican desde la Generalitat, agrava las consecuencias de lesividad de las víctimas. Asimismo, conviene recordar a todos los usuarios de la necesidad de atarse el cinturón de seguridad en todos los vehículos, también en los autocares.
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