El informe de calidad del aire en el Estado español durante 2024 de Ecologistas en Acción indica que hasta 5,2 millones de catalanes, es decir, el 64% de la población, respiraron aire contaminado por encima de los nuevos límites legales aprobados por la Unión Europea para el 2030. Así y todo, el informe, que analiza los datos recogidos por 790 estaciones oficiales de medida repartidas por todo el Estado español, 110 de ellas en Catalunya, recoge que la calidad del aire ha mejorado en el país respecto de los valores del año 2023 y los años anteriores a la pandemia de covid-19.
De hecho, el informe señala que hubo una reducción significativa de los niveles registrados de partículas en suspensión (PM10 y PM2,5), dióxido de nitrógeno (NO2) y ozono troposférico (O3), en porcentajes que oscilan entre el 14% y el 56% respecto de las medias del periodo 2012-2019. La entidad ecologista atribuye la reducción de los niveles de contaminación durante el 2024 a la evolución del sistema de generación energética que, a pesar de haber recuperado los niveles de combustión de petróleo previos a la pandemia, ha seguido reduciendo la presencia de la quema de gas en el mix energético y ha seguido aumentando la participación de las energías renovables en la generación, que en 2024 supusieron un 57% del total.
A pesar de apuntar también a la mejora de las precipitaciones durante 2024, el informe señala el cambio climático como un factor de primer orden en el agravamiento de los episodios de mala calidad del aire por partículas y ozono. Según Ecologistas en Acción, la estabilidad atmosférica invernal activó los episodios de contaminación por partículas procedentes del norte de África y el alto calor estival contribuyó al aumento del ozono, especialmente durante las olas de calor de julio y agosto.
La contaminación afecta a la gran mayoría de la población
El informe de Ecologistas en Acción conocido este lunes, indica que, según la normativa vigente y legal, que califican de "obsoleta", solo 185.000 personas de la Plana de Vic y el Prepirineu se habrían visto afectados por valores de contaminantes superiores a los objetivos actualmente legales. Por otra parte, afirman que, si se tuvieran en cuenta los valores recomendados por la OMS, la totalidad de la población y el territorio de Catalunya habría respirado aire contaminado en niveles perjudiciales a la salud.
Las partículas (PM10 y PM2,5), así como el dióxido de nitrógeno (NO2), siguieron afectando a la totalidad de la población catalana. Las partículas afectaron especialmente a las áreas de Barcelona, el Vallès-Baix Llobregat, el Camp de Tarragona y la Plana de Vic, donde se producen las principales actividades emisoras de este tipo de partículas.
El dióxido de nitrógeno generado por la combustión de los motores también superó los nuevos límites legales en las áreas urbanas de Barcelona y del Vallès-Baix Llobregat, que son las que más tráfico motorizado soportan. Así y todo, en el conjunto de Catalunya, la reducción media de los niveles de NO2 respecto de los valores promedio del periodo 2012-2019 fue del 33%. Esta reducción es especialmente notable en el área de Barcelona, que ha rebajado un 45% los niveles de este contaminante con respecto a la última década. Reducción que el informe afirma que se puede relacionar con la puesta en marcha de la zona de bajas emisiones en las rondas de la ciudad condal el año 2020.
Problema sanitario de primer orden
Según la Agencia Europea del Medio Ambiente, 7.000 personas murieron en Catalunya por culpa de los agentes contaminantes durante el año 2022, y eso supone un 10% del total de fallecimientos de aquel año. El informe avisa de que la contaminación del aire se tendría que tratar como un problema sanitario de primer orden, ya que los costes sanitarios y laborales derivados de la contaminación atmosférica representan, según el Banco Mundial, 50.000 millones de dólares al año, lo que supone un 3,5% del PIB español. Además, el informe señala que la provincia de Barcelona superó los 140 decesos por cada 100.000 habitantes mayores de 30 años por la especial incidencia de las partículas PM2,5 y el dióxido de nitrógeno (NO2).
Además, el informe pone de relieve que el 90% del territorio catalán estuvo expuesto a niveles de ozono que estropean la vegetación, desbordando el objetivo legal en las zonas de la Plana de Vic y el Prepirineu, que suponen el 10% de la superficie del país. Dentro del informe se apuntan dos zonas con elevados niveles de contaminación: el área de Barcelona y el Vallès-Baix Llobregat, por la especial incidencia del tráfico rodado, aeroportuario y marítimo y las actividades industriales presentes; y el Campo de Tarragona, especialmente afectada por las emisiones del complejo petroquímico y el puerto. Ecologistas en Acción indica que esta contaminación afecta a zonas rurales muy lejanas de los focos de actividades contaminantes, señalando que prácticamente no hay zonas libres de contaminación atmosférica.