En fase de reanudación, las visitas a los centros residenciales han adoptado nuevas medidas aprobadas por el Procicat este domingo. Destaca la ampliación a hasta tres familiares -en fase dos sólo se aceptaba uno por visita-, la frecuencia de entrada y cambian las medidas de seguridad sanitaria.
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Tiempo, frecuencia y espacio de visita
Sólo se podrá ir a ver a familiares a los geriátricos que tengan la situación controlada, y sólo se permitirán en residencias que tengan clasificación 'roja' –situación no controlada- si lo aconseja el proceso de atención a personas, especialmente al final de su vida. El tiempo de visita, que se recomiendan sólo una vez por semana, dependerá de la capacidad de cada centro pero el óptimo estaría en periodos no inferiores a diez días. También se recomienda que los centros que puedan habiliten un espacio exterior para visitas donde se puedan mantener distancias y se recomienda dar paseos por el exterior para reducir la circulación dentro de los centros.
Por otra parte, de acuerdo con el plan los centros categorizarán todos los espacios en función de los grupos de riesgo que acojan. De esta manera, habrá zonas verdes para personas sin Covid-19 y zonas rojas para casos positivos. Además, habrá zonas amarillas reservadas principalmente a residentes sospechosos de infección, pendientes de evolución o en cuarentena por contacto estrecho con un sospechoso o confirmado e ingresos procedentes de domicilio que tienen que estar un tiempo en aislamiento preventivo.
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Salidas de residentes
Con respecto a salidas de residentes, el plan contempla la recuperación de actividades como salir a la calle a dar paseos, visitas a casas de familiar o pasar las vacaciones en familia. Los residentes más autónomos pueden salir solamente si tienen capacidad para cumplir las medidas de protección. También se pueden autorizar salidas largas de un día para salidas familiares. Para poder hacer estas salidas, hará falta que la familia o el residente firmen un documento de declaración responsable y a la vuelta se tendrá que desinfectar el calzado o la silla de ruedas, lavar las manos y cambiarse de ropa y desinfectarla.
En el caso de estancias superiores a tres semanas, se tendrá que hacer aislamiento preventivo a la vuelta, comprobar síntomas e higiene estricta, así como reducir las actividades comunes que impliquen compartir material o pongan en peligro la distancia de seguridad. La dirección de la residencia planificará y pactará con las familias para hacer un retorno escalonado y controlado y poder hacer uno supervisión esmerada de los reingresos.
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Nuevos ingresos
Con el fin de poder ingresar en una residencia se tendrá que tener una PCR negativa hecha en un plazo inferior a las 24-48 horas los días previos, nunca más allá de los cinco días. La familia también tendrá que presentar una declaración conforme no ha estado en contacto estrecho con ningún caso sospechoso o confirmado de coronavirus en los últimos diez días.
Una vez una persona ingrese a una residencia tendrá que estar en aislamiento durante diez días, a excepción de personas que vengan de ingresos hospitalarios o sociosanitarios donde ya hayan estado en aislamiento.
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Núcleos sociales de entre 10 y 15 personas
Además, también se propone que se organicen núcleos sociales estables con los residentes y profesionales con el fin de reducir el riesgo a la hora de organizar actividades comunitarias y grupales a los centros. Según el plan, los residentes tendrían que estar divididos según unidades estables de convivencia de residentes y profesionales de unas 10 o 15 personas.
Los residentes que conformen un grupo de convivencia podrán compartir espacios comunes habilitados para cada grupo (salas de estar-comedor, zonas del jardín o terrazas) o cordero espacios comunes a todos los grupos que se tendrán que limpiar entre uso y uso (por ejemplo, el espacio de rehabilitación).